El año brillante de Atlético Nacional, en el que ganó la Copa Libertadores, llegó a la final de la Copa Suramericana y logró el título de la Copa Colombia, y en el que está ahora listo para jugar el Mundial de Clubes, ha obligado al técnico Reinaldo Rueda a atender otros frentes con nóminas alternas. Pero cada vez que apeló al plantel principal, le respondió: el equipo titular verde lleva 28 partidos sin perder.
La última vez que cayó el conjunto principal de Nacional fue el 22 de mayo, cuando lo hizo 0-1 frente a Santa Fe en la fecha 19 de la Liga, con gol de Yerry Mina. Desde entonces, jugó 10 partidos en el torneo local, con balance de siete triunfos y tres empates. A esos juegos de Liga hay que agregarles el remate de la Copa Libertadores: los dos partidos de semifinal contra São Paulo y las dos finales contra Independiente del Valle. Ahí, el invicto sube a 14 jornadas.
En la Copa Suramericana, Nacional se despidió invicto: ganó cinco partidos y empató otros cinco. Esos diez juegos hacen que la racha sin derrotas llegue a 24 encuentros.
Y para completar ese periodo favorable, Nacional jugó la semifinal y la final de la Copa Colombia con su equipo principal. Con Santa Fe, en la semifinal, empató en casa 1-1 y ganó en Techo 1-4. Y a Junior, en la final, lo venció en los dos juegos, 2-1 en Medellín y 0-1 en Barranquilla. Esos cuatro partidos dejan la racha en 28.
Desde aquella derrota con Santa Fe en mayo, Nacional perdió solamente cinco partidos: dos en la Copa Colombia (1-2 con Real Cartagena y 2-1 con Patriotas) y tres en la Liga (1-0 con Deportivo Cali, 2-1 con Millonarios y 0-4 con Santa Fe). Los primeros cuatro fueron con la nómina alterna y el último, que le costó la eliminación de la Liga, lo jugó con el equipo que venía de ganar el campeonato Sub-19, porque Rueda se llevó a 25 profesionales para Japón, a jugar el Mundial. Ahora confía en el buen rendimiento del equipo principal para hacer historia.
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