Tras la eliminación de la Copa Libertadores, luego de una efímera participación, Millonarios deberá enfocarse en sus nuevos objetivos, que se centran en los torneos internos, tanto en la Liga, en la que el fin de semana recibirá al Bucaramanga en El Campín, como en la Copa Colombia, en la que quedó ubicado en la fase de grupos.
Y el DT Miguel Ángel Russo es consciente de eso, tras reconocer que su equipo mereció más en la Libertadores y que están en deuda con la afición. “Tenemos que devolverle la alegría a la afición con trabajo y resultados. Estamos en un club grande, debemos cumplir con las expectativas e ir a ganar la Liga”, enfatizó.
Y para seguir con ese nuevo guión, el club debe recuperarse y levantar cabeza, pasar la página y comenzar de nuevo. Si bien en la Liga el comienzo no fue nada bueno, tras caer 1-2 con Independiente Medellín, ahora, en la tercera fecha (fecha 2, aplazada con Santa Fe) tendrá una oportunidad para sumar sus primeros tres puntos ante un rival bien formado como el Bucaramanga.
Pero eso no es solo con ganas. También es necesario que los jugadores asuman más compromiso en un equipo que como el propio DT ha dicho, cuenta con una nómina corta para afrontar el torneo. Para completar, las lesiones han mermado al plantel titular con las bajas de Juan Guillermo Domínguez y David Macalister Silva. Otra baja física es la del venezolano Jacobo Kouffaty, quien llegó como refuerzo pero aún no debuta debido a una lesión de la que ya se recupera, pero su puesta a punto será lenta, como lo recalca el entrenador. “Él nos debe dar más volumen de juego, pero irá paso a paso”. Y lo mismo sucede con Alexis Zapata, que aún no está listo físicamente y le ha costado acomodarse.
Por otro lado, el club sigue en la búsqueda de uno o dos refuerzos más. No ha logrado concretar la llegada de Duvier Riascos. El 17 de febrero cierra el libro de transferencias.
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