Fortaleza FC y Boyacá Chicó, o Boyacá Chicó y Fortaleza. El orden de los factores no altera el resultado. El tema del descenso, a seis fechas del cierre del torneo ‘todos contra todos’ y con 18 puntos por disputar, parece ser ya un tema resuelto. Solo una serie de resultados muy buenos para uno de los dos comprometidos, ligado a un pésimo tramo final para Jaguares o Deportivo Pasto cambiaría el triste destino y el fatal desenlace de los dos firmes candidatos para caer al abismo del descenso.
Lo de Fortaleza no es una sorpresa. El equipo capitalino durante el torneo no logró alcanzar a elevar su curva de rendimiento con buenos resultados y además, el plantel no fue reforzado para tales exigencias.
El DT Jorge Nilton Bernal, quien había sido uno de los héroes en el ascenso del equipo en el 2015, nunca pudo encontrar el acertijo para tener un panorama más despejado. Debido a eso, la directiva decidió marginarlo del timonel en junio de este año y reemplazarlo por Freddy Amazo, que a su vez tuvo la misión de mantener la categoría con un equipo cuya base son los jugadores juveniles.
Esa labor duró muy poco, algo más de un mes. Ese paso en falso le costó su cargo. Ya para este cierre de campeonato está encargado Carlos Barato. Sus intentos le han cambiado la cara al plantel, pero será muy difícil evitar su descenso, ya que los números no le dan para escaparse, salvo un milagro.
De los 14 partidos disputados, incluido el que abrió la fecha en la noche del viernes, el conjunto bogotano apenas tiene 3 triunfos, 4 empates y 7 derrotas, para un total de 13 puntos.
Chicó, en caída librePor su parte, el Boyacá Chicó, cuyo máximo accionista es Eduardo Pimentel, quien ha hecho labores también desde el banco, está en caída libre. La serie de resultados adversos refleja el agotamiento de su principal directivo frente a situaciones tanto de rendimiento deportivo como de presupuesto. Y la verdad es que su firme y férrea lucha ha sido adentro y afuera de las canchas.
Desde que la gobernación de Boyacá cortó relaciones comerciales, el conjunto ajedrezado se quedó sin posibilidad de maniobra económica y eso fue detonante para que estallara la crisis de resultados debido a los pocos refuerzos que llegaron para el torneo.
De los trece partidos disputados a la fecha, apenas ganó uno (20 de agosto, Chicó 2-Once Caldas 1) y empató uno con Nacional (1-1). El resto de juegos los ha perdido, algunos injustamente o con las ‘botas puestas’.
Solo 4 puntos, con la peor campaña y con el descenso a la vuelta de la esquina, lejos de las alegrías del club que logró el ascenso en el 2003 y de la euforia cuando alcanzó su primer y único
DEPORTES