Las glaciaciones que congelaron Europa en el Paleolítico obligaron al hombre a cubrirse con pieles. Desde entonces, la necesidad evolucionó hasta combinarse con el placer, como analiza la reedición actualizada del clásico ‘Breve historia del traje y la moda’.
Ha sido largo el recorrido hasta llegar a la moda como catalizadora de movimientos sociales, potente industria y símbolo de distinción, resalta esta obra del historiador y crítico de arte James Laver, editada ahora por Cátedra, que apareció por primera vez en 1968.
Laver, oriundo de Liverpool y descrito como “el hombre que hizo respetable el estudio del traje” y conservador del Victoria and Albert Museum de Londres durante 20 años, escribió un manual que se considera clave para los estudiantes de arte y moda, y que vuelve en una nueva edición en español.
En sus 10 capítulos, este estudio rastrea el porqué de la moda en la historia de la humanidad y plantea como eje la relación entre el poder y la moda, ilustrada con fotografías de esculturas, pinturas y carteles publicitarios. Se trata de un repaso minucioso a la historia del vestido, desde su primera función meramente utilitaria hasta la moda individualista del siglo pasado.
La reina Nefertiti paseando por su palacio, ataviada con un vestido de lino semitransparente y su alta corona de oro y lapislázuli, es el referente por excelencia del origen de la moda. Sin embargo, la historia del traje se remonta a mucho antes.
El libro del experto británico comienza en la Edad de Hielo, cuando el ‘Homo sapiens’ hizo de las pieles de animales una herramienta de supervivencia, y llega hasta la última posguerra mundial, que vio nacer una feminidad renovada para una mujer activa, resultado del ingenio aplicado a la escasez de materias primas.
Pasa además por el Neolítico, cuando la ganadería trajo consigo la lana y otros materiales que, ya en Mesopotamia, facilitaron el surgimiento de las primeras prendas. Y por efectos como el drapeado, que marcó un punto de inflexión en la historia del traje al hacer que, por primera vez, una prenda diferenciara a una persona ‘civilizada’ de un ‘bárbaro’, que era todo aquel que siguiera vistiendo trajes entallados.
James Laver, que falleció en 1975, dejó tras de sí una extensa obra sobre la moda, el traje y el estilo, que refleja su conocimiento del desarrollo del vestuario, con títulos como ‘Gusto y moda: de la Revolución francesa al presente’ (1937) y ‘La moda infantil en el siglo XIX’ (1951).
EFE