Entre los artistas que conformaron la amplia movida del rock alternativo en los años 90, solo unos pocos nombres definieron realmente la identidad del género y sembraron las raíces del grunge con una energía completamente nueva y sentando diferencias con las leyendas que les precedían de las décadas anteriores. Entre esos contados arquitectos sonoros está Chris Cornell.
El músico, oriundo de Seattle –ciudad que se convirtió en la meca de ese sonido en los años 90– y quien este jueves falleció a los 52 años, marcó con su potente voz y su guitarra el sonido de bandas muy influyentes como Soundgarden y Audioslave.
Lo peculiar de Cornell es que con la primera banda marcó a la generación del grunge, en su imperio de los 90, y con la segunda, a quienes se acercaban al género en la década siguiente, a partir del 2001.
De hecho, Soundgarden surgió en 1984, varios años antes del grunge y de la popularización liderada por Nirvana, pero expertos y documentales sobre la época señalan que fueron Cornell y su grupo, en paralelo con bandas como Pixies y R.E.M., quienes definieron el estilo que dio pie al grunge e inspiraron el nacimiento de muchas otras bandas.
Esa capacidad que tuvo Cornell para reinventarse luego con Audioslave fue muy valiosa tras el momento de transición en el cual muchas agrupaciones alternativas desaparecieron.
Pero, al parecer, no satisfecho con el éxito de sus grupos, Cornell también consolidó una carrera en solitario, en la cual arrojó álbumes muy bien reseñados como Euphoria Morning, en 1999. Sin embargo, congeló el proyecto mientras salía de gira con Audioslave, hasta que volvió a grabar en estudio en el 2007, el álbum Carry On.
Un siguiente disco solista, de 2009, titulado Scream, recibió críticas muy negativas, especialmente por el resultado más pop al que llegó de la mano del productor Timbaland. En su carátula, Cornell aparecía rompiendo una guitarra, como si quisiera marcar una nueva época en su carrera, hacer una declaración.
Entonces, Cornell revivió Soundgarden, con todos sus integrantes, y grabó un álbum que se llamó King Animal y el cual volvió a darle críticas positivas. El músico hacía un nuevo movimiento camaleónico y volvía a estar vigente.
Su último trabajo como solista fue el álbum Higher Truth, en 2015.
Paradójicamente, la única oportunidad que Colombia tuvo de ver en vivo a Chris Cornell se dio hace tan solo unos meses, en diciembre del 2016, cuando el artista hizo parte del festival de música y cultura popular Almax, en Corferias.
La muerte del artista coincide en fecha con el suicidio (el 18 de mayo de 1980) de Ian Curtis, cantante de la banda Joy Division, lo que ya ha abierto un nuevo mito alrededor de la fatalidad del rock.
Desde este jueves, los servicios de streaming y las tiendas de música como iTunes y Amazon reportaron que las ventas de las canciones de Soundgarden y Audioslave llegaron al primer lugar de sus listados.
En la tarde de este jueves, apenas horas después de que se conociera la noticia de la muerte del artista, la oficina forense del condado de Wayne, Míchigan, señaló que Cornell se ahorcó en la habitación de hotel en la que los policías encontraron su cuerpo sin vida.
Según su esposa, Vicky, Cornell no había mostrado señales de depresión ni tenía motivos para suicidarse. Fue ella quien, vía telefónica, pidió a los agentes que fueran a ver qué ocurría en el cuarto, luego de ella haber intentado comunicarse con él sin obtener respuesta.
Hasta el cierre de esta edición aún se desconocían los resultados del examen toxicológico que le estaban practicando para determinar si había consumido sustancias sicoactivas.
Escuche apartes de los éxitos de las bandas del cantante Chris Cornell.
CARLOS SOLANO
Cultura y Entretenimiento
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