Los desfiles de Llamadas volvieron a la capital de Uruguay. Este carnaval, tradicional desde hace 200 años puso a bailar, al ritmo del Candombe, a la ciudad del Río de la Plata. Este tradicional baile, traído por los esclavos africanos en la época de las colonias en América, es ahora uno de los referentes de la cultura en Montevideo.
Miles de uruguayos y turistas estuvieron en las calles disfrutando de los disfraces, de la música y de la fiesta. El desfile de Llamadas, considerado como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad por la Unesco, es considerado como la marcha culmen de la fiesta uruguaya. El carnaval, además de los bailes y el Candombe, también cuenta con más de 40 comparsas, murgas, humoristas y parodistas, aunque es el baile de los que fueran esclavos africanos el plato principal.
Los tambores, vedettes, escoberos y gramilleros, estos dos últimos famosos personajes del carnaval, son los que, bajo los ojos de un jurado compuesto por doce personas, compiten por la presentación más llamativa. En ese concurso los criterios más importantes son el desplazamiento, la expresión corporal y la sincronización entre el movimiento y los tambores.
Los personajes como El escobero o El gramillero evocan a los curanderos africanos o a los ministros de naciones (espacios para que los esclavos pudieran hacer sus rituales africanos) y buscan redimir la dignidad de las comunidades negras, no solo en Uruguay, sino en toda América Latina.
Los ganadores de las comparas reciben, además de la clasificación inmediata para las Llamadas del año siguiente, premios entre los 153.000 (5.300 dólares) pesos uruguayos y los 74.000 (2.500 dólares). Además, para la ejecución de los desfiles, la Intendencia de Montevideo destinó recursos públicos para pavimentar las calles que iban a ser mas concurridas por los participantes y asistentes al carnaval.
De acuerdo al director de eventos de la Intendencia, hubo una apuesta clara por mejorar la experiencia en el evento. Incluso una de las calles fue pintada de blanco, con el fin de hace resaltar los colores en los vestidos y máscaras reconocidos por estar en esta fiesta. También se invirtió en iluminación y un sistema de registro electrónico para la identificación de los participantes. La administración local de Montevideo destinó alrededor de 170.000 dólares para dichas mejoras de infraestructura, argumentando que, además de las Llamadas, es común que durante todo el año pasen comparsas de Candombe en los barrios Sur y Palermo de Montevideo.
Esta fiesta se celebra desde 1956, constituyéndose hoy como una de las más importantes expresiones y tradiciones culturales del país 'charrúa'.