El pasado martes 23 de mayo, sin mayor suspenso ni preámbulo, el músico y compositor británico Harry Styles—quien decidió concluir su etapa con One Direction para comenzar un nuevo proyecto como solista—, apareció sorpresivamente en la tarima del escenario Lunario, en Ciudad de México, donde ofreció un concierto íntimo y acústico para menos de 1000 personas.
Aunque la presencia del cantante generó una enorme histeria de emoción entre sus seguidores, su rostro no denotaba alegría, sino seriedad y tristeza. Hizo un gesto con la mano para pedirle al público que dejara de gritar, y al cabo de unos minutos tomó el micrófono y reveló que se sentía muy afligido por los ataques terroristas que ocurrieron el pasado lunes en Manchester durante el concierto de la cantante Ariana Grande.
"Cuando programé este espectáculo, lo hice para que fuera una celebración. He tenido algunas de mis presentaciones favoritas aquí en México y sentí que debía venir a festejar con todos ustedes, pero infortunadamente hoy no es un tiempo para celebrar. Anoche hubo una tragedia en mi ciudad natal, Manchester, y he quedado con un hueco muy grande en mi corazón", dijo Styles.
Luego, ante una audiencia más calmada y notablemente conmovida por sus palabras, el artista continuó su discurso: "mi primer show fue en el Manchester Arena y siempre he tenido maravillosas experiencias allí. Cada día, al levantarse, ustedes pueden elegir lo que van a dar al mundo y quiénes quieren ser. Por favor amen siempre. Espero que entiendan y que se unan a mí en un minuto de silencio por todas las víctimas y las familias afectadas".
Después de un emotivo momento de reflexión, Styles abandonó el escenario, pero regresó diez minutos después para dar inicio a su concierto con la canción 'Two Ghosts'. Enseguida, saludó nuevamente al público, presentó a los integrantes de su banda y continuó su recital con 'Ever Since New York'.
Tras lanzar una bandera de México y mandar algunos besos a sus fanáticas—que lloraban, saltaban y no paraban de gritar—, el cantante interpretó 'From the dining table', el décimo y último tema de su nuevo disco.
Luego se escuchó 'Sweet Creature' y, finalmente, para cerrar una noche de sentimientos encontrados, concluyó su concierto con 'Sign of the Times', quizás la canción más importante de este álbum, pues fue el sencillo con el que Styles debutó como solista.
Aunque los asistentes esperaban una presentación más extensa, en la que no se quedaran por fuera canciones como 'Kiwi', 'Carolina' o 'Meet me in the Hallway', lamentablemente los atentados terroristas ocurridos en Manchester influyeron en el ánimo de Styles y, lógicamente, también afectaron la duración del concierto.
Sin embargo, el vocalista se despidió en medio de una enorme ovación y prometió regresar muy pronto a México, como parte de una gira que se espera pase también por Colombia, aunque al respecto aún no hay nada confirmado.
Daniel Torres
Cultura y Entretenimiento
*Por invitación de Sony Music Colombia
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