El apagón que vivió Colombia entre marzo de 1992 y febrero de 1993 se debió a una sequía generada por el fenómeno del Niño que afectó el nivel de los embalses y dejó al país sin energía durante varias horas al día.
Ese mismo apagón fue una de las causas por las cuales los actores colombianos se quedaron sin sus regalías, como le contó la actriz Consuelo Luzardo a este diario en agosto del 2014.
“Antes de 1991 los actores vivíamos de esas regalías, pero en la época del apagón los canales nos pidieron que nos pusiéramos en su papel y dijimos ‘muy bien’. Se acabó el apagón y no volvieron las regalías”, contó.
Lo ratificó este 18 de enero: "En el apagón se cambió la modalidad, y ahora resulta que, según nuestros contratos de prestación de servicios, las regalías dizque están incluidas en nuestro pago mensual".
Con la llegada de nuevas figuras a la televisión, y también con pagos aceptables, la gran mayoría de actores decidió seguir trabajando sin cobrar este derecho y cediéndolo, como cuenta el actor Fernando Solórzano.
Él, precisamente, ha sido tendencia por hablar de estas regalías que, en estos momentos tan difíciles para tantos actores, “sería ideal recuperar”, dice.
Agrega que cada telenovela puede tener unas diez ventas internacionales y esos derechos los paga la entidad que compra, no las productoras, pero estas perciben esos dineros.
De hecho, recuerda que, en 1991, cuando Música maestro, una telenovela en la que participó, fue vendida a Venezuela, gracias al dinero que recibió por regalías pudo pagar su crédito del Icetex.
Por su parte, el actor Julio Correal, directivo de la Asociación Colombiana de Actores (ACA), afirma que en los años 80, gracias a un acuerdo entre el Círculo Colombiano de Artistas (Cica) y Asomedios, se establecieron unos porcentajes por pagos de repeticiones.
“Luego del apagón, cuando no se siguieron cobrando, las tarifas del trabajo se incrementaron, pero en los últimos años han bajado. Además, antes se hacían producciones largas, lo que implicaba que teníamos buena parte del año ocupado, ahora las grabaciones son mucho más cortas y uno se expone a estar sin trabajo varios meses del año”, afirma.
Agrega que con la Ley del Actor, hay un artículo que él y sus colegas actores están en mora de explotar. “Es el 12, que dice que los derechos de fijación y reproducción se deben tener por aparte”.
Desde hace 10 años, los actores reciben pagos por derechos de comunicación pública, que perciben por producciones nuevas y repeticiones en el país y en el exterior, y que ellos obtuvieron gracias a la ley 1403 del 2010.
Estos derechos son pagados por los canales públicos y privados, y algunos cableoperadores, pero no son cancelados por los más grandes de esta industria.
Se cancelan cada año y los recursos que recibe cada actor están determinados por su personaje en la serie (protagónico, reparto, etc), así como por el rating.
Recientemente, un nutrido grupo de actores hizo un comercial para solicitar que los teleoperadores más importantes paguen estos dineros, los cuales llevan casi una década sin cancelar.
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