Gracias a su ubicación al sur de España, la isla de Tenerife se estableció como una especie de puente entre las culturas de América, África y Europa. Esa mezcla especial se podrá apreciar este año en el Festival de Teatro de Manizales, que tendrá como invitado de honor a la isla española y que se realizará del 2 al 8 de octubre.
El encuentro presentará tres producciones de esa región, empezando con 'Cambuyón', que será el espectáculo inaugural. Dirigida por Jep Meléndez y Carlos Belda, esta obra plantea un viaje musical, especialmente percusión, y su trama se desarrolla en un viejo barco en el que sus integrantes ejecutan rutinas coreográficas de varios ritmos.
Así se subraya el intercambio cultural que significan las fusiones musicales (el título de la obra nace de los trueques comerciales que se hacían a mediados del siglo XX en los puertos de Canarias y Madeira, en los que los vendedores solían gritar: “Come Buy On” –“vengan a comprar”–).
Belda recuerda fusiones tan elocuentes como el claqué (tap), que alcanzó popularidad en los musicales tipo Broadway, pero que nació en un contexto mucho más popular. “El claqué es una parodia que hacían los esclavos negros del clogging de los amos irlandeses”, dice Belda.
El proceso de investigación de la obra comenzó entonces en África, se trasladó a Newcastle, para profundizar en el clogging, y llegó hasta Cuba, país del cantante Raúl Cabrera.
“Todos los ritmos afrocubanos tuvieron una conexión muy directa con el jazz y lo que ha venido después: el funk, el hip hop y el house”, cuenta Belda.
El viaje de 'Cambuyón' ha pasado por escenarios tan importantes como el Festival de Edimburgo y el New Victory Theater del Off-Broadway de Nueva York. “El ritmo es algo que va al estómago directamente, intelectualmente puedes ver cosas que te gustan más o menos, pero la conexión con el público es muy directa”, dice Belda.
El camino que va de la mente al corazón fue la inspiración del coreógrafo Daniel Abreu para la obra Garganta, que el Tenerife Danza Lab estrenó hace dos años.
“La experiencia fue muy rica no solo por el intercambio sino porque me permitió trabajar de otra forma y parir este trabajo que a mí personalmente me parece de una belleza y de una poesía sublime”, explica Abreu, Premio Nacional de Danza de España en el 2014.
Definiendo la garganta como espacio geográfico, como ese punto que conecta lo que se siente con lo que se piensa, Abreu y los bailarines compusieron una coreografía que además habla sobre diferentes acepciones del amor.
A eso se le añade una puesta en escena limpia, con pocos recursos escenográficos, que pone el acento en sus protagonistas
El escenario es una gran multinacional, de esas que viven en un ritmo frenético ligado a sus necesidades de producción. En los últimos dos años, tres de sus empleados se han suicidado y la directora inicia una investigación. Esa es la trama de 'La punta del iceberg', del canario Antonio Tabares, que el grupo Delirium Teatro montó bajo la dirección de Severiano García.
“El texto trata un tema muy actual y tal como se va enredando la trama, a medida que vamos conociendo la situación de los personajes, desde luego te va creando una gran intriga”, explica García, que también actúa en este montaje.
La directora de la multinacional tiene la tarea de determinar si los suicidios fueron casos aislados o hay algo más allá, un drama escondido bajo la superficie. A partir de varias entrevistas con los empleados, la directora va descubriendo el putrefacto ambiente en el que tienen que laborar.
“Sí que estamos un poco hartos todos de tener esa presión de producir y no se sabe muy bien para qué ni hacia dónde vamos. Llega un momento que uno pasa más horas en el trabajo que en su casa, y eso no es vida”, añade Severiano García.Luego del montaje de Delirium, el texto de Tabares ha llegado a teatros como La Abadía, en Madrid, e incluso a cine, en una producción protagonizada por Maribel Verdú.
Este año, el Festival de Manizales tiene como eje temático la reconciliación, de ahí que su eslogan sea ‘El festival de los abrazos’.
La curaduría se enfocó en producciones que hablan sobre la reconciliación, pero no solo de conflictos bélicos, sino de dramas más internos.
En ese sentido se destacan producciones colombianas como ‘Yo NO estoy loca’, monólogo de Fabio Rubiano protagonizado por Marcela Valencia y que se centra en un rabioso reclamo de una mujer por no comprometer sus principios, y ‘Círculos / Ficciones’, adaptación del texto de Joël Pommerat dirigida por Fabiana Medina y que se desarrolla en varios periodos históricos.También sobresale la presencia de jóvenes grupos nacionales como Casataller Teatro, El Trueque, La Entrevista y Teatro Inverso.
Festival de Teatro de Manizales, 2 al 8 de octubre. Informes de programación y boletería en el sitio: www.festivaldemanizales.com.
YHONATAN LOAIZA GRISALES
CULTURA Y ENTRETENIMIENTO
En Twitter: @YhoLoaiza