Acaba de salir al público la edición de 'Guadalupe años sin cuenta' dentro de Libro al Viento, el programa de la Alcaldía de Bogotá que permite que los habitantes de la ciudad accedan a ejemplares gratuitos, los lean y luego los dejen en lugares públicos para que otros lectores puedan disfrutarlos. Funciona desde 2004 y se han publicado más de 100 títulos.
‘Guadalupe años sin cuenta’, creación colectiva del Teatro La Candelaria, que este año está cumpliendo 50 años, es una de las obras representativas del teatro contemporáneo latinoamericano y hoy, cuando estamos en la implementación del acuerdo de paz, cobra una vigencia probablemente mayor a la que tuvo cuando fue estrenada en 1975.
Aunque al principio iba a ser una obra sobre el líder de las guerrillas liberales que se estaban formando en los años 50, luego se fue convirtiendo en una impactante reflexión sobre el absurdo que significa matarnos entre compatriotas, entre hermanos.
Es lo que sucede entre Jerónimo, quien por fuerza de los acontecimientos termina convertido en guerrillero, y Robledo, su paisano tolimense, que por cosas del destino se convierte en soldado y luego en un traumatizado veterano de los que Colombia envió a Corea a pelear un guerra que no nos pertenecía.
De esa guerra sale convertido en The Colombian Tiger, curioso personaje que con sus delirios tiene una de las escenas más divertidas de la obra.
Con seguridad los promotores de lectura de los parques, las bibloestaciones y las bibliotecas aprovecharán las geniales catorce escenas de esta obra para organizar lecturas dramatizadas que harán las delicias de los asistentes a esos espacios.
Al margen. Felicitaciones a la Libélula Dorada por sus cuarenta años de creación, al cabo de los cuales ha acompañado la infancia de varias generaciones que hoy vemos al grupo como parte fundamental de nuestro patrimonio cultural.
ALBERTO SANABRIA
Crítico de teatro