La ONG Funecorobles, dedicada a apoyar agricultores del Valle del Cauca en sus procesos de cultivo, transformación y comercialización de productos tradicionales de la región, logró impulsar sus ventas y aumentar su mercado por medio del programa Quiero Mi Tienda Virtual, del MinTIC, con el que pudieron ingresar al mundo del comercio electrónico.
Funecorobles está ubicada en el corregimiento de Robles en Jamundí (Valle del Cauca) y está conformada por 21 agricultores (10 hombres y 11 mujeres) afrodescendientes de 11 fincas de la región, para quienes busca alternativas de transformación y comercialización de los productos agrícolas, artesanales y medicinales propios de la región.
La principal fuente de ingresos de esta ONG está constituida por la venta de productos tradicionales como el polvo de pipilongo y el curcupipi (mezcla de cúrcuma y pipilongo); el manjar blanco, el dulce cortado negro elaborado con técnicas ancestrales; las arbolcocadas, que incluyen fruto del árbol del pan, coco y panela, y chúcula de patio, elaborada a base de cacao transformado, entre otros.
Carlos Alberto González, líder y representante legal de esta organización, explica que la finalidad de Funecorobles es fortalecer la identidad territorial y el empoderamiento de las comunidades negras mediante la conservación de la biodiversidad, tanto ambiental como cultural.
“Tenemos 42 especies agrícolas productivas en fincas tradicionales pertenecientes a habitantes de la región y buscamos que las personas potencialicen al máximo su producción. Si logramos darles valor agregado a los productos, transformarlos y venderlos, podemos ayudarles a mejorar sus ingresos y mejorar las condiciones de vida de sus familias”, agrega el líder de Funecorobles.
Quiero Mi Tienda Virtual, una iniciativa del Ministerio TIC, que contó con el apoyo técnico de Findeter y vendaenlinea.co, como uno de los tres operadores del programa, le ha permitido a la ONG dar sus primeros pasos en el mundo digital.
Durante aproximadamente cuatro meses, el líder de Funecorobles participó en el proceso formativo y acompañamiento, como parte de los beneficios que entregó Quiero Mi Tienda Virtual, con el cual adquirió las competencias básicas necesarias para el adecuado uso y la apropiación de estrategias y herramientas digitales.
Posteriormente, se desarrolló el proceso de implementación de la tienda virtual de la ONG con la cual se ha logrado visibilizar sus productos de categorías como dulces, chocolates artesanales, condimentos y plantas medicinales y atraer nuevos clientes.
Desde su tienda virtual https://funecorobles.vendaenlinea.co/, la ONG quiere dar a conocer toda su oferta de productos, ampliar su mercado y lograr aumentar sus ventas, lo cual contribuirá a que las comunidades del Pacífico y el suroccidente del país sigan con su decidida apuesta de conservar la cultura local.
Conocimiento ancestral
Funecorobles ha adelantado inventarios de flora y fauna, que permitieron la formulación de dos planes de manejo de los humedales ligados a las fincas tradicionales de los agricultores, las cuales funcionan como bosques productores y protectores de ecosistemas y de cuerpos de agua.
“Con el proceso de transformación de los productos, buscamos que las personas potencialicen sus cultivos porque, en la medida en que se continúe con la investigación, la transformación y las ventas en línea, vamos a tener un mayor arraigo de las familias hacia el territorio. De esta manera, logramos dar mayor visibilidad a las especies agrícolas de la región”, explica González.
Otro proyecto que desarrolla es el relacionado con las plantas medicinales, aromáticas y condimentarías. Para eso, Funecorobles lleva a cabo investigaciones, apoyadas por algunas universidades, y ha logrado avances en especias como el pipilongo (parecida a la pimienta), producto que ya se encuentra disponible en la tienda virtual.
Sostenibilidad e inclusión
Si bien la ONG también apoya a los cultivadores de naranja, mandarina, banano y cacao en toda la logística y comercialización de sus productos a gran escala en las plazas de mercado de Santa Elena y Alameda en Cali, su labor va más allá.
Por ejemplo, Funecorobles ha implementado diversas iniciativas, una de ellas relacionada con el tema de ‘negocios verdes’, que la ONG entiende como la manera de asegurar la sostenibilidad alimenticia y la comercialización de los productos.
Rosalba Escobar, una de las asociadas, comenta: “Toda la vida trabajé con los dulces, el manjar blanco y las cocadas. Me vinculé con la fundación y me ayuda a vender los productos que elaboro en las diferentes actividades que se presenten, ya sea en el territorio o en otras partes de la región”.
El objetivo de Quiero Mi Tienda Virtual es contribuir al fortalecimiento de los procesos comerciales y aumento de las ventas de las mipymes y comercios del país, ofreciéndoles acompañamiento y formación para que aprovechen al máximo los beneficios del comercio digital.
Así, la tienda virtual que implementó Funecorobles les permite a los agricultores comercializar todos los productos procedentes de sus fincas, mientras continúan contribuyendo con el cuidado de las especies agrícolas, la preservación de los conocimientos ancestrales y aseguran que esta labor reporte ingresos y estabilidad para todos los asociados y sus familias.