El mercado laboral actual exige profesionales cada vez más capacitados. El conocimiento aplicado adquiere mayor relevancia, y por ello es necesario validar habilidades en la hoja de vida.
La educación continua es un modo práctico de mantenerse actualizado. Se trata de cursos teórico – prácticos que pueden ser virtuales o presenciales, con una duración que generalmente no supera un semestre, y en los que se perfeccionan habilidades técnicas y conocimientos específicos de diversos temas. Suelen estar avalados por instituciones educativas del país o del exterior, las cuales respaldan los conocimientos de los alumnos con un certificado o diploma de asistencia.
Estos cursos pueden complementar su título de pregrado. Por ejemplo, si su perfil es en artes, puede adquirir conocimientos en otras áreas, como administración, finanzas o marketing. Otro tipo de programas de educación continua son aquellos que ofrecen conocimientos aplicables a todos los campos profesionales, como por ejemplo los cursos de idiomas.
Complementar el perfil es una manera estratégica de posicionarse como profesional altamente capacitado. Brinda la oportunidad de adquirir conocimientos provenientes de distintos sectores y combinar especificidades que lo diferenciarán del resto de los candidatos. De esta manera los cursos certificados y los diplomados se convierten en el camino indicado para llevar al profesional al próximo nivel de su desarrollo a largo plazo.
La riqueza de la interdisciplinariedad que puede ofrecer un profesional con conocimientos complementarios es altamente valorada por las empresas. Por ello es conveniente permanecer en constante aprendizaje.
Para hacerlo, puede consultar en distintas fuentes la extensa oferta académica sobre el tema. Por suerte existen en Internet portales que agrupan la oferta de las diferentes instituciones y le permiten comparar en línea. Compare, seleccione el programa que mejor se ajuste a sus necesidades y acérquese aún más a su próximo empleo.
Comentar