"¡Mira como saca el moco por ese hueco, míralo!", exclamó una mujer a su amiga cuando la inmensa jaula de hierro que transportaba al elefante Pirinolo salió desde el cerrado zoológico Matecaña, en Pereira, con rumbo al Bioparque Ukumarí en la misma ciudad.
La amiga apuntó la cámara de su smartphone a la parte alta del guacal que era transportado por un trailer. "Hermoso, hermoso, debe estar desesperado allá adentro", comentó mientras disparaba una ráfaga de fotos.
El traslado del paquidermo de 25 años de edad y 5 toneladas de peso fue la novedad durante los siete kilómetros que separan al Matecaña, que está ubicado en frente del aeropuerto del mismo nombre y que tras la salida de todos los animales se convertirá en un hotel. En el cerrado zoológico solo quedan dos elefantas y unas cuantas aves.
Mientras pasaba la caravana detras y adelante del largo camión que transportaba el elefante, decenas de curiosos sacaban sus celulares para hacer unas fotografías. Lo mismo hicieron motociclistas y conductores que pasaban cerca del convoy.
Incluso, un ciclista se unió a la caravana desde el Matecaña y llegó hasta el bioparque.
El operativo para el traslado de Pirinolo comenzó muy temprano con la dirección de Frank Carlos Camacho, propietario del santuario de conservación animal Africam Safari de Puebla, México, y experto en movilizar elefantes. Pirinolo entró fácil a la jaula porque estaba acostumbrado a desayunar allí desde hace varios meses. Cuando estaba adentro se bajó la puerta y el portentoso animal quedó confinado.
Camacho había explicado previamente que los elefantes no se pueden sedar para transportarlos porque ellos duermen recostados. No lo hacen acostados porque su propío peso puede oprimir sus pulmones y quitarles la respiración.
En Ukumarí Pirinolo contará con un hábitat más amplio, que incluye praderas y una piscina. Además, estará con las dos elefantas, Maggie y Kin, de quienes fue separado hace nueve años cuando nació su hijo, Zimbabue. Ahora estarán juntos y el experto mexicano vaticina que se podrá reproducir con una de ellas.
Con el traslado de Pirinolo concluye prácticamente la operación Arca de Noé, el proyecto para trasladar desde el antiguo zoológico Matecaña a Ukumarí todos los animales, en el menor tiempo posible y con seguridad. En este solo queda un oso gris, que por su prolongada edad, debe ser movido con mucho cuidado.
PEREIRA
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