Tras seis años de retraso en la actualización del estudio de microzonificación sísmica de la capital quindiana, el alcalde Carlos Mario Álvarez señaló que se viene trabajando en este propósito, que es el más importante de su administración.
“El objetivo a mediano plazo, más importante, es que Armenia tenga el estudio de microzonificación, es el verdadero objetivo de esta administración, estamos trabajando en equipo con la universidad, ahora que estamos haciendo la revisión del POT”, dijo el mandatario durante el acto de conmemoración de los 18 años del sismo que sacudió al Eje Cafetero y que acabó con la vida de más de mil personas en Armenia.
“Tenemos que aprovechar para que con la Unidad Nacional de Gestión del Riego tengamos por fin el estudio que va a permitir que todos estemos más tranquilos, mientras no lo tengamos no podremos dormir tranquilos, la ciudad tiene que crecer inteligentemente”, sentenció el alcalde.
Sin embargo, desde hace varios años se vienen realizando acercamientos entre la Universidad del Quindío y la Administración local para comenzar con este estudio que cuesta más de mil millones de pesos y que permite definir cómo se comporta determinada zona durante un sismo, y establece recomendaciones para el diseño y construcción de edificaciones sismoresistentes. Con base en este estudio, la ciudad podrá planificar su desarrollo, de acuerdo a las restricciones definidas en cada zona.
Varios docentes y expertos de la universidad han advertido la necesidad de realizar este estudio y aunque han destacado la voluntad del mandatario de la ciudad para adelantarlo aún no hay nada concreto.
El estudio con el que actualmente cuenta la ciudad data del 2000, fue financiado con dineros de cooperación internacional tras el sismo de 1999 y es un estudio detallado de cada comuna de Armenia. El Reglamento Colombiano de Construcción Sismo Resistente plantea que ciudades de más de 100 mil habitantes como Armenia deben tener este tipo de estudios.
Por ejemplo el ingeniero y director del Observatorio Sismológico de la Universidad del Quindío, Hugo Monsalve, señaló que esta zona es de alta amenaza sísmica por lo que hay posibilidades de terremoto en cualquier momento y se hace necesario que los constructores tengan este estudio de microzonificación.
“Ha habido buena respuesta del alcalde, están consiguiendo los recursos, esperamos que este año se pueda concretar algo, pero no se ha sacado ni siquiera el decreto de actualización, la norma exige que se actualice con las nuevas técnicas que se han venido desarrollando, y es una necesidad y que requiere que las autoridades tomen cartas en el asunto”, dijo Monsalve.
El ingeniero agregó que el Observatorio monitorea de cerca a la falla Silvia Pijao, una de las principales fallas asociada al Sistema de Fallas Romeral (SFR) que pasa por el Eje Cafetero y que según el ingeniero, “tiene deformaciones fuertes en el trazo que va desde Pijao hacia Manizales, la monitoreamos porque es la más activa del sistema Romeral, la amenaza está presente”.
El geólogo Armando Espinosa Vaquero, quien advirtió dos meses antes (en noviembre de 1998) de un posible sismo que devastaría al Quindío, también alertó sobre la necesidad de adelantar la microzonificación sísmica de Armenia.
“El Concejo está repitiendo la historia (del Concejo de 1999) porque por ley tienen que actualizar ese estudio y la universidad pasó una propuesta que costaba unos 1.500 millones de pesos pero les pareció que es demasiado”.
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