Chocó está lleno de maravillas por donde se le mire. Paisajes excepcionales, atardeceres rosados que se despiden frente al río Atrato, gastronomía exquisita, música cargada de folclor y, por supuesto, gente ‘todo bien’ que con una sonrisa contagia hasta al más triste.
Y son precisamente esas personas las que hacen que el desarrollo de este departamento avance, de a poco, para dejar de lado los estigmas y estereotipos negativos que han sido tan repetitivos a lo largo de la historia y que tienen a los chocoanos tan cansados.
Mario Luis Benítez Arboleda es uno de esos negros, tal y como a él le gusta denominarse y catalogar a los suyos, que trabaja incansablemente por mejorar la situación de su hogar, su amado Chocó.
Tiene 44 años de los cuales más de 20 ha trabajado para hacer de Quibdó y, en general, del pacífico colombiano un lugar más digno y con menos problemas, especialmente de orden público y falta de oportunidades.
Así fue como, con su esfuerzo, en el 2009 hizo realidad uno de sus más grandes sueños: ‘Mario en tu Radio’, la primera emisora digital de Quibdó. “Siempre quise una emisora para entretener a mi gente donde solo se escuchara salsa”, afirma. “Pero con el tiempo le metí ‘otros ingredientes’ y lo combiné con la llegada del Pin de BlackBerry. Fui de los primeros en informar a través de ese chat sobre cosas del Chocó”.

Mario vive en Quibdó, capital del departamento del Chocó.
Ana González Combariza / EL TIEMPO
Mario, nacido en Condoto (Chocó), estudió un técnico de Comunicación Social y Periodismo en la Corporación Unificada de Educación Superior Nacional (CUN), en Bogotá, ciudad en la que nunca tuvo pensado quedarse pues creía que sería más útil si volvía a su departamento y aplicaba en algo lo que había aprendido. “Las personas me decían que para qué me iba a la selva, que allá no lograría hacer nada y yo, en cambio, pensaba que todo estaba por hacerse”, menciona.
Pasó un tiempo y Mario dejó de trabajar solo en la emisora. Andrés Zapata, un vecino suyo de toda la vida, le dio la idea de usar otras redes sociales para dar a conocer más la emisora para que esta se popularizara. “Desde hace 9 años, empezamos a informar por Facebook y WhatsApp, eso no pasaba aquí en el Chocó. La gente decía que lo que no salía en ‘Mario en Tu Radio’, no era cierto”, dice Benitez.
Andrés actualmente tiene 24 años, trabaja como voluntario en la emisora, ha aprendido empíricamente lo básico del lenguaje audiovisual, estudia inglés y francés en la Universidad Tecnológica del Chocó y, aunque no recibe una remuneración por lo que hace, también está convencido de que la vida en Chocó puede ser distinta.
La información que divulgan por la emisora es netamente social. Si hay un hueco en alguna vía, si alguna persona requiere de ayuda o si se está haciendo una recolecta para conseguir fondos por una buena causa, ahí está ‘Mario en tu radio’, eso sí, sin dejar de lado su amada salsa. “Creamos ‘Mario en Tu Radio’ con la ilusión de alegrar la vida de los chocoanos, de la comunidad latina en el mundo, pero no quisimos quedarnos ahí”, menciona Mario con su tono de voz fuerte y pausada.
Las personas me decían que para qué me iba a la selva, que allá no lograría hacer nada y yo, en cambio, pensaba que todo estaba por hacerse
Cuenta además que la emisora puede escucharse a través de su propia página web www.marioenturadio.com.co o desde la app que puede ser descargada desde cualquier tienda virtual (iOS o Play Store). “A mi me decían que eso no sería posible, que para qué perdía mi tiempo, que nadie me iba a escuchar. Ahora tengo audiencia desde Estados Unidos y varias ciudades en el mundo”, asegura.

Esta fue la primera emisora digital del Chocó.
iOs
Luego de 6 años en los que la emisora empezó a tomar fuerza, Mario entró a estudiar Administración pública territorial como carrera profesional en la Escuela Superior de Administración Pública, ESAP. Inmediatamente después terminó una especialización en Gerencia de seguridad social y proyectos de salud en la Universidad Cooperativa. “Quería conocer de la salud, de lo público, de lo administrativo. Aprender sobre herramientas que me permitieran ayudar a todos en mi ciudad”.
Si yo cambio, el Chocó cambiaUn día, cuando se disponía a entrar a una de las clases de la especialización, un compañero que ya conocía de sus labores sociales, le comentó que estaba preocupado por la falta de tolerancia y de cultura ciudadana que había en Quibdó, lo cual le dio el impulso a Mario para crear lo que, hasta hoy, es uno de sus más grandes proyectos y ambiciones: ‘Si yo cambio, el Chocó cambia’.
Se trata de una plataforma social que nació en el 2014 como un emprendimiento digital que se centra en la reconstrucción del tejido social del Chocó promoviendo la transformación de cada individuo impulsando, a través de redes sociales y con la ayuda de la emisora, el conocimiento de los valores y buenos hábitos para que la violencia, los problemas de movilidad, la cultura ciudadana y la falta de sentido de pertenencia deje de ser un común denominador en este departamento.
“Aquí hace falta cultura social pero más allá de eso es que no hay tolerancia en general. Antes los negros no se mataban entre ellos, ahora sí. Esto es un desafío grande y debemos cambiar ese imaginario”, asegura Mario quien está convencido de que el ejemplo es la herramienta más poderosa para transformar.
Portando una camiseta en la que es visible su frase insignia ‘Si yo cambio el Chocó cambia’ este líder tiene claro que no puede hacer este trabajo solo y es por eso que empezó a rodearse de más personas que también creyeran en que el Chocó no es solo lo que muestran las noticias, ni los rezagos de una guerra absurda.

Empezó a rodearse de más personas que también creyeran en que el Chocó no es solo lo que muestran las noticias, ni los rezagos de una guerra absurda.
Ana González Combariza / EL TIEMPO
Amigos, vecinos, su novia, profesores, y hasta el rector de la Universidad Tecnológica del Chocó, David Emilio Mosquera Valencia, le han dado el espaldarazo que necesita para continuar adelante con la emisora y sus redes sociales. “En el caso puntual de la universidad la plataforma cae como anillo al dedo en el proceso que nosotros tenemos de formación integral de nuestros profesionales y como se trata de una plataforma digital y moderna eso facilita a que se pueda permear a la juventud”, asegura Valencia desde su oficina.
Mario ha tocado muchas puertas, no ha recibido el respaldo. Es más valorado por la comunidad que por la administración del departamento, lo cual debería ser al contrario
Actualmente su página en Facebook tiene más de 2100 seguidores. Allí comparten videos de sus obras sociales, eventos educativos, noticias importantes de Quibdó e información cultural.
No obstante, algunas personas del Chocó insisten en que las entidades gubernamentales podrían apoyar esta iniciativa para que tenga un impacto más grande en la región. Darsio Díaz, amigo de Mario desde hace más de diez años, reconoce que “a ‘Si yo cambio el Chocó cambia’ le hace falta acompañamiento institucional y aunque Mario ha tocado muchas puertas, no ha recibido el respaldo. Es más valorado por la comunidad que por la administración del departamento, lo cual debería ser al contrario”.
Jackson Ramírez, amigo y compañero de ‘Si yo cambio el Chocó cambia, asegura que es tal el compromiso por ver cambios en Quibdó que “Mario ha querido resolver problemas de la gobernación aunque no es su función, como por ejemplo el hecho de tapar los huecos en algunas vías de la ciudad”.
Chocó es uno de los lugares más húmedos del mundo pero ni la lluvia ni el inclemente clima son impedimentos para seguir adelante con ‘Si yo cambio el Chocó cambia’.
Mientras maneja su moto, medio de transporte más popular de esta zona del país, Mario se desespera. No puede creer que las personas, aún viendo el semáforo en rojo se crucen, no importa si van con niños, sin casco o si deben hacer algunas maniobras peligrosas para adelantar.

Está convencido en que si los chocoanos trabajan siempre unidos, son positivos y tienen la disposición de ayudarse los unos con los otros, todo va a mejorar.
Ana González Combariza / EL TIEMPO
Cree que los problemas más graves de Quibdó están enmarcados en el maltrato de los unos con los otros, el irrespeto por la ciudad, la falta de pertenencia y la envidia. “Estamos en un departamento y en una capital ávida de autoreconocimiento. Hace falta que las personas reconozcan lo bueno de los demás sin odios, sin rabias y sin envidias”, afirma decepcionado.
Está convencido en que si los chocoanos trabajan siempre unidos, son positivos y tienen la disposición de ayudarse los unos con los otros, todo va a mejorar. Sabe que la cultura ciudadana es primordial pero que es un trayecto y proceso lento, que las nuevas generaciones son las que deben escuchar su mensaje con más fuerza y que se requiere de disciplina e incidencia para que sus objetivos se puedan llevar a cabo.
A través de su emisora digital y sus redes sociales muestra lo bueno del Chocó porque sabe que hay un potencial inexplorado en esta zona del país.
ANA GONZÁLEZ COMBARIZA*
EL TIEMPO.COM
Twitter: @Combariiza
*Apoyado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y ACDI / VOCA