“Estoy amenazada, me quieren matar”, reveló Janneth Rocío Colimba Nausil, considerada por las autoridades como la testigo principal en la desaparición de la niña Paula Nicol Palacios Narváez, ocurrida el 28 de diciembre del 2014 en zona rural del municipio de Buesaco (Nariño).
La mujer, de 34 años y estudiante de investigación judicial, asegura haber observado al vehículo y a las personas que habrían raptado a Paula Nicol hace tres años.
He tenido amenazas, pero hasta el momento no he recibido ningún apoyo de las autoridades. Me dicen que si sigo hablando, el primero en irse será mi hijo
“Yo vi una camioneta que iba a una alta velocidad. Me pareció similar a la de la alcaldía de Chachagüí”, declaró Colimba.
Quince días después de la desaparición de la menor, tras enterarse por medio de las noticias de lo ocurrido, la testigo elaboró el retrato hablado del hombre que llevaba en sus brazos a Paula Nicol en el vehículo. Se trata de Germán Paguatian Insandará, a quien el 9 de noviembre pasado el Juzgado Primero Penal del Circuito Especializado de Pasto le impuso una condena de 42 años y 6 meses de prisión por el delito de desaparición forzada agravada.
“He tenido amenazas, pero hasta el momento no he recibido ningún apoyo de las autoridades. Me dicen que si sigo hablando, el primero en irse será mi hijo”, advirtió. Agregó que la última intimidación la recibió en septiembre pasado.
Dentro del lento proceso judicial que se sigue en Pasto por el caso, Colimba ha participado en las cuatro audiencias públicas realizadas a lo largo de 2017.
De acuerdo con las investigaciones oficiales, los secuestradores entregaron a la menor a una banda criminal en Cali (Valle del Cauca) y posteriormente la transportaron hacia Ecuador. En un comienzo se tejió la posibilidad de que había sido vendida a una red de traficantes de órganos.