Por sus marcados rasgos europeos y su equipo de grabación, los reporteros holandeses Derk Johannes y Eugenio Ernest Marie fueron confundidos con agentes del servicio secreto de los Estados Unidos (CIA) por guerrilleros del Frente Nororiental del Eln, quienes los abordaron en zona rural del municipio del Tarra, en Norte de Santander, y los mantuvieron privados de la libertad desde el sábado 17 de junio.
Los extranjeros se dirigían a esta localidad de la región del Catatumbo para realizar un trabajo periodístico, cuando los subversivos los interceptaron, les requieren sus elementos de trabajo y procedieron a conducirlos a un paraje selvático, donde empezaría el drama del cautiverio para los ciudadanos europeos.
Ellos pensaban que éramos agentes de la CIA, que éramos gringos tratando de infiltrar sus ubicaciones
Estos momentos previos que rodearon el plagio perpetrado por este grupo ilegal fueron relatados este sábado, 24 de junio, por estos comunicadores holandeses, durante una rueda de prensa que convocó la Embajada de Holanda y los integrantes de la comisión humanitaria encargada de devolver a la libertad a estos ciudadanos extranjeros.
“Ellos pensaban que éramos agentes de la CIA, que éramos gringos tratando de infiltrar sus ubicaciones con nuestras cámaras y micrófonos (…) Ellos creían que estábamos con gente mala, entonces fue difícil explicar nuestra labor en el terreno”, puntualizó con un español poco fluido, Derk Johannes, periodista liberado.
El exsecuestrado añadió que los guerrilleros les ofrecieron buen trato y que nunca recibieron amenazas por parte de sus captores. “Estas condiciones fueron una dosis de tranquilidad. Sin embargo, todo lo que ocurrió fue una experiencia con miedo por preservar la vida en menos de una semana”, dijo.
Este enviado del programa Sooporloos de la emisora pública de Holanda Kro-Ncru también relató que el descenso de aeronaves y el movimiento de tropas por parte del Ejército generaron instantes de tensión entre el grupo de siete guerrilleros, fuertemente armados, que velaban por su seguridad.
Por un momento, sus captores se sintieron arrinconados y decidieron internarlos en la espesa selva para evadir el despliegue militar ordenado por las autoridades de la zona.
“Después de este momento, estuvimos durante 18 horas selva adentro. Empezamos a pensar que nunca íbamos a sobrevivir, porque es tan peligroso y tan hostil ese escenario. Fueron instantes en los que el miedo nos invadió”, destacó.
Los dos profesionales europeos llegaron a Colombia para hacer un reportaje sobre los padres biológicos y orígenes de colombianos adoptados en Holanda. Johannes indicó que por ahora no lo van a culminar y que al regreso a su país de origen, Holanda, se sentará con su equipo de trabajo para reconsiderar la región del país, donde logren finalizar sus reportajes.
En medio el relato de su secuestro, este presentador y periodistas recordó algunos apartados del comunicado del Eln con el que fue liberado él y su camarógrafo, a la comisión humanitaria,
“Este documento nos inquieta, porque desconocíamos la existencia de esta organización. Entre líneas, esta guerrilla pide una mayor presencia en vías, escuelas y carreteras en esa zona alejada”, concluyó.
La entrega de estos periodistas se produjo en la noche del viernes, en zona rural de la región del Catatumbo. Según la comisión humanitaria que los recibió, integrada por la Defensoría del Pueblo, la Personería de Tibú y la Cruz Roja, los liberados se encuentran en buen estado de salud.
GUSTAVO ANDRÉS CASTILLO
Corresponsal de EL TIEMPO
Cúcuta
* Con información de Efe
