Los uniformados identificados como Yeison Fernando Quijano y Jeison Efraín Daza, que fueron emboscados este fin de semana por presuntos guerrilleros del Eln cuando adelantaban labores de patrullaje en la capital del departamento de Arauca, se encuentran a la espera de ser remitidos en las próximas horas al Hospital de la Policía, en Bogotá.
Ambos se encuentran recluidos en un centro asistencial de Arauca y se recuperan sin mayores contratiempos. Sin embargo, uno de ellos presenta un pronóstico reservado, debido a una grave lesión en su rostro que le produjo el impacto de una bala.
Los uniformados fueron atacados el sábado en horas de la noche, cuando se desplazaban en una motocicleta en el barrio Sabanales, de la capital araucana. Allí, dos sujetos armados los interceptaron y arremetieron contra ellos. Luego de la acción, los responsables de la emboscada se dieron a la fuga con rumbo desconocido.
“El trabajo médico y asistencial permitió mantenerlos estableces y en revisión, por lo que se hizo necesario su traslado a la ciudad de Bogotá para someterlos a cirugía y continuar con los tratamientos médicos durante su proceso recuperación total”, explicó el coronel Edinson Rodríguez, comandante de la Policía de Arauca.
Por ahora, las autoridades no descartan ofrecer una recompensa a quienes aporten información para identificar a los atacantes de estos patrulleros, como ocurrió hace una semana, cuando la institución ofreció 5 millones de pesos por la identidad de los homicidas del policía David Francisco Nates, asesinado este mes, en el barrio Los Fundadores.
De manera preliminar, la Fuerza Pública atribuye estas acciones armadas a la guerrilla del Eln, que en menos de ocho días, ha asesinado a un patrullero; es señalada de ser la responsable de perpetrar ataques armados que han dejado tres policías heridos; ha dinamitado un tramo del oleoducto Caño Limón-Coveñas; y ha generado zozobra entre la población, bloqueando con vehículos pesados algunos ejes viales de esta región del país.
En medio de la escalada de acciones violentas durante este fin de semana, que dejó como saldo tres policías heridos en este departamento, el obispo de Arauca, monseñor Jaime Muñoz Pedroza, pidió a la guerrilla del Eln -señalada estar detrás de las emboscadas- que renuncie a esta serie de hostigamientos, como mensaje de paz en vísperas del cese al fuego bilateral.
“Quiero hacer un llamado a todos para que hagamos creíble ese proceso; para que hagamos que la gente sienta que es verdad y que el camino que se ha emprendido es cierto y verdadero”, indicó este jerarca de la Iglesia.
La inminente tregua, que inicia el primero de octubre y se extenderá por tres meses, fue anunciada a principios de este mes por las delegaciones de este grupo subversivo y el Gobierno Nacional, que están sentadas en una mesa de diálogos en Quito, Ecuador.
La medida, considerada como un avance en esta ronda de diálogos, busca desescalar la intensidad del conflicto en esta región del país. En este sentido, busca suspender los secuestros, impedir las voladuras en el oleoducto Caño Limón Coveñas y frenar el reclutamiento a menores de edad.
ARAUCA