Las voces de auxilio de unos ciudadanos que pedían ayuda para una mujer habitante de la calle que se encontraba en trabajo de parto en un lote baldío en el barrio Morichal, la atendieron dos uniformados del grupo de protección al turismo que se encontraban patrullando en el populoso sector de Villavicencio.
De inmediato, el intendente Javier Manrique y el patrullero Regino Rocha se dirigieron al lugar y tras inspeccionar el predio, ubicaron a la mujer y asistidos por un enfermero que en su día de descanso transitaba por el sector asistieron a la mujer de unos 30 años.
Enseguida, los uniformados, capacitados en primeros auxilios, revisaron los signos vitales de la madre, la asearon y a los pocos minutos recibieron al bebé, que con su primer llanto llenó de alegría a la mujer, los uniformados y el enfermero.
La escena por un momento borró de sus mentes la distancia que los separa de sus familias en esta Navidad, no querían más, él era su mejor regalo, todos parecían coincidir entre sonrisas y lágrimas que se escaparon, era un regalo divino.
Al recién nacido y su progenitora los trasladados a un centro hospitalario para su atención y valoración, donde el personal médico entregó un resultado positivo del procedimiento y del estado de salud estable de la madre y el bebé.
La señora teniente coronel Jemmy Andrea Torres Malagón, comandante encargada de la Policía Metropolitana de Villavicencio, felicitó a los uniformados y dio un parte de satisfacción asegurando que la institución cuenta con una gran calidad humana en su personal y que una vez más se enorgullece de haber cumplido con su deber.
