Los peligrosas carreras ilegales de motociclistas que se realizan en horas de la noche desde hace algunas semanas en Pereira tienen en alerta a las autoridades de tránsito de la ciudad.
Uno de estos eventos, conocidos popularmente como piques, fue evidenciado durante un operativo dirigido por agentes de tránsito y la Policía Metropolitana en La Villa Olímpica y Belmonte. Allí, alrededor de 500 motocicletas que estaban participando de esta actividad ilegal atacaron con palos y piedras a los uniformados.
Juan Gabriel Londoño, supervisor y agente de tránsito que estuvo en el hecho, indicó que los motorizados buscaban provocarlos con estos ataques.
“Se instaló un operativo persuasivo para evitar que los conductores de motocicleta que realizan prácticas ilegales se ubicaran sobre la Avenida 30 de Agosto con calle 100. Allí empezaron más de 500 motos que pasaron frente a nosotros lanzándonos piedras, palos y haciendo maniobras para generar provocaciones”, dijo Londoño.
Sergio Alexander Trejos, director del Instituto de Movilidad de Pereira, resaltó que “en el lugar fueron capturadas cinco personas y se van a tomar las medidas correctivas necesarias para evitar los piques ilegales y las agresiones a los agentes de tránsito”.
Trejos enfatizó en que no se puede permitir que se perturbe la tranquilidad de las comunidades en los sectores de Corales, La Villa y Belmonte con estas prácticas que son llevadas a cabo los viernes y domingos.
Se van a tomar las medidas correctivas necesarias para evitar los piques ilegales y las agresiones a los agentes de tránsito
El funcionario dejó claro que no bajará la guardia para que la seguridad retorne a las vías de la ciudad y que tiene conocimiento de otros puntos de concentración donde practican esta actividad ilegal.
Otro plan del Instituto de Movilidad para mitigar esta actividad ilegal, que atenta contra la vida de los motociclistas y la de otro ciudadanos que transitan en la noche por la vía, es el de poder acercarse a los diferentes clubes de los motociclistas que no realizan estas prácticas para intentar crear campañas de sensibilización y del correcto uso de este vehículo.
Tenga en cuenta que, según la ley colombiana, por participar en los piques ilegales el infractor tendrá que pagar un sanción económica superior a un salario mínimo y también le podría ser suspendida su licencia de conducción.
NATALIA CHAVERRÍA
Para EL TIEMPO
PEREIRA