Colombia ha soportado más de medio siglo de guerra y esto ha ocasionado la indignación de cientos de personas que claman porque el conflicto termine.

Las huellas de la guerra y el dolor quedan en los corazones de cada colombiano que hoy le habla a la paz con la esperanza de reconciliación.

Los ciudadanos sembraron una semilla de esperanza en los árboles, que llenos de cintas, expresan que el país quiere paz.

El tiempo pasa y la historia de Colombia se sigue escribiendo pero esta vez con una esperanza de paz, reconciliación y perdón.

El país necesita de más personas que se unan a estas iniciativas, promoviendo la paz y la construcción de un país mejor.

Colombia puede escribir un nuevo comienzo a partir de la construcción de una paz estable y duradera.

Nuestro país necesita de personas que como ellos llenen de optimismo este camino por la paz.

Para que el sonido de la naturaleza no quede en silencio hay que decirle si a la paz.

Decenas de personas se acercaron a cientos de árboles en el CAM (Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena) para amarrar a estos, cintas blancas pidieron pronto acuerdo y la paz para Colombia.

Víctimas, empleados y estudiantes se unieron a esta campaña cívica y afirman q quitarán las cintas cuando esté firmado el acuerdo con las FARC.