Una nueva mortandad de peces, en su mayoría lisas y mojarras, se registró este jueves en la Ciénaga Grande de Santa Marta, en el sector del caño San Luis, según pescadores y habitantes del municipio de Pueblo Viejo (Magdalena).
“Este jueves, amanecieron unos peces muertos en la Ciénaga, al frente de Pueblo Viejo, en el caño San Luis, donde los pescadores pescaban (…) Se recogió una parte porque eso se pudre y afecta la comunidad y otra parte se la llevó la corriente para el mar”, dijo el pescador Catalino Díaz.
Esta emergencia se presenta una semana después de la mortandad de aproximadamente 10 toneladas de peces en el complejo de Pajarales, que, según el informe preliminar del Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras (Invemar), habría sido causada por los altos valores de salinidad y temperatura, y la falta de oxígeno.
El resultado preliminar de las muestras tomadas el pasado 6 de agosto por el grupo Gama del Invemar fue entregado a la Corporación Autónoma Regional del Magdalena (Corpamag) y el Ministerio de Ambiente.
Hace una semana hubo una mortandad de aproximadamente 10 toneladas de peces. Archivo Particular
“Lo que se pudo ver fue un aumento inusual de la temperatura mayor a 31 grados centígrados, salinidades mayores a 51 unidades, PH muy alto también y el oxígeno, como fue de día, presentaba unas concentraciones muy altas, pero es de suponer que las noches anteriores se registró oxígeno cero en la zona. Estas condiciones muestran que hubo unos eventos de anoxia por bajas de oxígeno y también hipoxia por altas de oxígeno”, dijo el subdirector científico del Invemar, Jesús Garay.
La alta salinidad en la Ciénaga Grande se debe a que en los últimos años hubo una prolongada sequía, lo que causó un déficit hídrico, la disminución del nivel del agua y la concentración de las sales. “Eso hace que se presenten episodios de exceso de materia orgánica y nutrientes, crecen plantas muy rápido, pero se degradan rápido también, y ocurren mortandades ya sea por pérdida de oxígeno o por algas potencialmente nocivas”, agregó Garay.
Los análisis de fitoplancton, cuyos resultados se conocerán en 10 días, permitirán confirmar si además de la falta de oxígeno también hubo presencia de algas nocivas en el complejo lagunar.
El Invemar dijo que la reapertura de los caños, que permiten la entrada de agua dulce del río Magdalena a la Ciénaga, ayudaría a recambiar el agua que está estancada en las ciénagas de Pajarales, reduciendo la salinidad del sistema y mejorando la calidad del agua.
La alta salinidad en la Ciénaga Grande se debe a que en los últimos años hubo una prolongada sequía. Archivo Particular
No obstante, señaló que se deben considerar los posibles impactos negativos que también se generarían, como el aumento de sedimentos, nutrientes y materia orgánica proveniente del río Magdalena, así como la nueva suspensión de los sedimentos del fondo de la Ciénaga aumentando la turbidez y los niveles de materia orgánica.
“Estos impactos negativos pueden propiciar eventos de eutrofización por el incremento de materia orgánica y nutrientes, agudizando los episodios de mortandad masiva de peces”, dijo la entidad.
SANTA MARTA