Con banderas blancas, globos, pancartas y carteles alusivos a la paz, se llevó a cabo este lunes una marcha por parte de la comunidad de Tibú, Norte de Santander, para apoyar una marcha contra la violencia y por la paz, en la cual se pidió por la liberación de Diego Lozano, quien fue secuestrado el pasado 13 de enero.
La reunión se congregó en el parque principal Tomás María Vergara, en una marcha por el cese de toda actividad violenta por parte de los grupos al margen de la ley.
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Los participantes se congregaron y se sintieron respaldados por el apoyo de la administración de Tibú y su alcalde Nelson Leal López, quien decretó día cívico para que todos sus funcionarios asistieran a la marcha.
“Fue magnífico, la gente nos abrió las puertas, el llamado a la marcha fue todo un éxito, bastantes gremios también estuvieron presentes, las personas pidieron por la paz, el cese a la violencia y la liberación de Henry Pérez, líder social de La Gabarra, quien desapareció en 2016, y de Diego Lozano, el ingeniero de la empresa contratista de Ecopetrol que fue secuestrado el 13 de enero”, dijo el alcalde Leal.
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Unas 1.500 personas participaron en la marcha y se desplazaron desde la vía principal del municipio hasta la plaza de mercado. Posteriormente, en el palacio municipal, se llevó a cabo el evento cultural.

Centenares de personas apoyaron en las calles de Tibú la marcha contra la violencia y por la paz.
Archivo particular
El pasado 13 de enero se registró el secuestro del ingeniero Diego Lozano en el pozo petrolero 188 de Tibú. Según versiones preliminares, dos hombres armados se habrían camuflado en un vehículo que lleva los alimentos al pozo amenazando al conductor.
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De esta forma pasaron la seguridad que hay en el acceso al pozo. Llegaron al lugar y con armas de fuego se llevaron al ingeniero Lozano, quien estaba a cargo del Pozo.
Ecopetrol, tan pronto conoció el hecho, rechazó la acción e indicó que "el trabajador fue retirado de su sitio de trabajo por hombres armados, mientras se encontraba desarrollando labores propias al proceso de abandono del pozo T 888K. Luego de interrumpir su labor, fue amenazado y obligado a abordar un vehículo, que posteriormente tomó rumbo desconocido".
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Según las investigaciones, la acción fue realizada por sujetos que se identificaron como integrantes del frente 33 de las disidencias de las Farc. Dicha información está en validación de las autoridades.
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