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En enero murió asesinado un líder social cada 46 horas

Luego del asesinato de Sandra Liliana Peña, hombres armados dispararon contra la comunidad indígena.

Luego del asesinato de Sandra Liliana Peña, hombres armados dispararon contra la comunidad indígena.

Foto:Juan Pablo Rueda

Indepaz reveló la lista de líderes sociales que han sido asesinados en lo corrido del año.

Nación
La cifra que revela el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz es preocupante. En los primeros 33 días del año fueron asesinados 17 líderes y tres firmantes del acuerdo de paz.
Los departamentos que más concentran crímenes son Cauca (5) y Arauca (4), seguidos por Putumayo (2), Nariño (2), Antioquia (1), Meta (1), Casanare (1) Chocó (1).
Siete de esos líderes eran comunales, tres indígenas, dos ambientalistas, uno campesino, otro reclamante de tierras, uno cívico, un afrodescendiente y uno cultural.
Por su parte, los crímenes de los tres firmantes de paz asesinados en este primer mes del año se han registrado en Arauca, Magdalena y Caquetá.
Los asesinatos conmocionaron al país, todos fueron hechos con sevicia. Ese es el caso de José Albeiro Camayo Güetio, guardia indígena del Cauca, que fue asesinado frente a niños el pasado 24 de enero. También el caso de Luz Marina Arteaga Henao, médica de profesión y lideresa campesina, defensora de derechos y reclamante de tierras, quien desapareció el 11 de enero y su cuerpo fue hallado cinco días después en el río Meta.
Uno de los crímenes que más conmocionó al país fue el del líder ambiental de apenas 14 años, Breiner David Cucuñame quien fue asesinado a tiros en el resguardo Las Delicias, Cauca.

Luz Marina, la reclamante de tierras a la que callaron

Luz Marina Arteaga, de profesión médica, lideresa campesina, defensora de derechos y reclamante de tierras del proceso de Matarratón y El Porvenir en el municipio de Puerto Gaitán (Meta), vecino de Orocué.

Luz Marina Arteaga, de profesión médica, lideresa campesina, defensora de derechos y reclamante de tierras del proceso de Matarratón y El Porvenir en el municipio de Puerto Gaitán (Meta), vecino de Orocué.

Foto:Corporación Claretiana Norman Pérez Bello

Luz Marina Arteaga Henao era médica de profesión y reconocida lideresa campesina, defensora de derechos y reclamante de tierras del proceso de Matarratón y El Porvenir, en el municipio de Puerto Gaitán (Meta).
Lideraba el proceso de exigencia de cumplimiento de las sentencias STP 16298 de 2015 de la Corte Suprema de Justicia y la SU-426 de 2016 de la Corte Constitucional, que ordena a la Agencia Nacional de Tierras (ANT) adjudicarles estas tierras, así como a las entidades gubernamentales la protección de los derechos fundamentales de comunidades campesinas históricas.
También era veedora del programa de adulto mayor de Orocué, municipio de Casanare, vecino de Puerto Gaitán, donde era activa participante de la recolección de firmas del proceso de revocatoria del mandato del alcalde de Orocué, Monchy Yobany Moreno.
Por este activismo, señalan las corporaciones Claretiana Norman Pérez Bello y Jurídica Yira Castro, defensoras de derechos humanos, se hizo visible en la zona y fue blanco de amenazas.
“Había recibido en reiteradas ocasiones amenazas de muerte de personas que se hacían pasar por actores armados y le decían que dejara de estar peleando por tierras y que no asistiera a reuniones en el marco de la exigencia de tierras”, informaron.
En el 2021 la Corporación Claretiana denunció ante la Fiscalía la amenaza contra integrantes del proceso de Porvenir y Matarratón y de la misma organización de derechos humanos, así como seguimientos y el intento de secuestro de uno de sus integrantes.
El 2 de octubre de 2019, dos hombres desconocidos, con edades aproximadas de 25 y 45 años, rondaron e hicieron vigilancia por largo tiempo a la finca El Raudal, propiedad de la lideresa Luz Marina Arteaga.
Los desconocidos les hicieron preguntas a las personas de la comunidad sobre su paradero como: “¿Cuándo va a venir a la finca? ¿En dónde está y cuándo se comunica con ustedes?”.
Los vecinos también alertan que los desconocidos señalaron saber que la lideresa había hecho presencia recientemente en la finca, ya que el lugar se encontraba limpio.
Esta misma situación se repitió el 6 de octubre de 2019, donde la comunidad menciona que tres hombres desconocidos que se transportaban por canoa por el río Meta la estaban buscando. “Estas amenazas fueron puestas en conocimiento de las diferentes entidades encabezadas por el presidente Iván Duque, así como a la Unidad Nacional de Protección, quienes desconocieron la gravedad de la situación asignándoles unas medidas blandas”, denuncian las corporaciones Claretiana Norman Pérez Bello y Jurídica Yira Castro.
La lideresa desapareció el pasado 11 de enero, cuando salió de su finca hacia el casco urbano de Orocué, Casanare. Y su cuerpo fue hallado, cinco días después, sin vida, a orillas del río Meta.

El guardia que sacrificó todo para cuidar su territorio

José Albeiro Camayo.

José Albeiro Camayo.

Foto:Archivo particular

A José Albeiro Camayo Güetio lo persiguieron las amenazas, secuestros y atentados durante su vida en la guardia indígena del Cauca.
Tenía 42 años y fue uno de los fundadores de la guardia y uno de los más aguerridos defensores de su comunidad.
Tenía el rol de Kiwe, nombre nasa para los líderes. Para sus amigos era un hombre que tenía como armas su valor, un bastón y una peinilla. Había soportado ataques de todo tipo. Le habían asesinado a un hermano y un sobrino.
Vivió su infancia hasta la adolescencia como estudiante de la Institución Educativa para el Desarrollo Intercultural de las Comunidades (Inedic), ubicada en el mismo territorio del resguardo Las Delicias, en zona rural de Buenos Aires, donde nació y fue asesinado.
Siendo un niño ya era un guardia indígena, pues esa era su vocación por la defensa de los territorios de los nativos. Decía que su visión era la de un indígena que buscaba transmitir un mensaje de paz, a través del viento, del sonido y la flauta.
Aprovechó una emisora que se creó en Las Delicias para transmitir ese mensaje de tranquilidad y armonía a los integrantes del territorio Las Delicias. Al tiempo seguía ejerciendo labores como guardia indígena.
Después de terminar procesos en la guardia indígena local fue nombrado como coordinador de guardia a nivel zonal de la llamada Cxhab Wala Kiwe, en 2013.
Acompañó este proceso hasta 2016 y en el 2018 fue nombrado coordinador de toda la guardia indígena del norte del Cauca hasta el año pasado.
Buscaba que los grupos armados respetaran a los indígenas desde hace más de 10 años, en épocas en que las Farc tenían azotado el Cauca con tomas guerrilleras y hostigamientos. En ese entonces, los grupos que afectaban el norte del departamento eran el sexto frente y la columna ‘Jacobo Arenas’ con el Eln y los paramilitares asentados en el Naya.
Los últimos tres años arrecieron los ataques de las disidencias que quedaron tras el acuerdo de paz. Camayo, dicen miembros de la comunidad, fue blanco de intimidaciones y calumnias. En agosto de 2019 fue víctima de un atentado, cuando se movilizaba por la vía entre Toribío y Caloto. Dos meses después fue secuestrado, al parecer por disidentes. Fue amarrado a un poste con alambre de púas y luego fue abandonado en ese sitio.
En abril del 2020, hombres armados lo intentaron interceptar en el mismo resguardo Las Delicias cuando iba en un carro, pero logró escaparse.
Y el 24 de enero pasado llegaron miembros de la columna móvil ‘Jaime Martínez’, de las disidencias, al mando del ‘Paisa’, a intimidar a la población del resguardo Las Delicias, sacaron a Camayo de su casa y fue asesinado con tiros de fusil frente a niños.
Toda la guardia de su pueblo lo acompañó a su tumba con cantos y sus bastones de mando, recordando a su líder que decía: “Muchas veces aguanté frío, hambre, soledad de estar lejos de mis hijos solo por defender mi territorio”.

El joven indígena que cuidaba los árboles en el Cauca

Breiner Cucuñame, de 14 años, se formaba para ser guardia indígena y dedicarse a la protección del medioambiente.

Breiner Cucuñame, de 14 años, se formaba para ser guardia indígena y dedicarse a la protección del medioambiente.

Foto:Archivo particular

Breiner David Cucuñame tenía apenas 14 años cuando fue asesinado el pasado 14 de enero por integrantes del frente ‘Jaime Martínez’ de las disidencias de las Farc, en el resguardo Las Delicias, en el norte del Cauca.
Era el mayor de cuatro hermanos, hacía séptimo grado, le gustaba jugar fútbol, sembrar árboles y las motos.
Breiner, que ya era miembro de la guardia indígena Nasa, y su padre Samuel habían salido temprano de trabajar en la construcción de una vivienda y de camino a su casa se encontraron con que la guardia, con sus bastones de mando, intentaba sacar de sus territorios a un grupo de jóvenes de las disidencias que patrullaban con sus fusiles, como lo intentan hacer regularmente en esta zona, lo que ya había generado varios altercados con la comunidad indígena.
Ese día, la discusión entre la guardia y las disidencias terminó en tragedia. Breiner David y Guillermo Chicame, guardia indígena y agente escolta de la Unidad Nacional de Protección, fueron asesinados por el grupo armado.
“A nosotros solo nos interesaba salir de ahí, de ese fuego”, recuerda su padre, Samuel Cucuñame.
Breiner, dice su padre, era una persona alegre, sin miedos. “Era juicioso. Como todos los niños, tuvo su rebeldía en su tiempo y uno como padre debía aconsejarlo”.
“Tenía un espíritu y un cuerpo que no se dejó convencer de los violentos, de que el arma era la mejor salida. Yo quiero que lo recuerden como ese muchacho que se paraba en la raya y le gustaba la vida sana y tranquila”, señala.
Breiner David era miembro de la Guardia Indígena Estudiantil, con la cual realizaba actividades de siembra de árboles y limpieza de ríos. Era un defensor de la madre Tierra, la misma a donde, tras una masiva ceremonia a la que asistieron más de 500 personas, ha vuelto.
“Lastimosamente, tiene uno que devolverlo tan joven a la madre Tierra, pero así es la vida, injusta a veces. Igual, hay que devolverlo porque si la naturaleza lo pidió a esta temprana edad, no podemos luchar contra la corriente”, dijo su padre.
NACIÓN 
CON INFORMACIÓN DE JUSTICIA
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