La esperanza de que Mariana Henao Jaramillo, de 10 años, fuera encontrada con vida se desvaneció cuando comenzaba la tarde del pasado jueves y la madre reconoció a su hija en un cuerpo hallado en el río Cauca. (También: En el río Cauca, hallaron cuerpo de niña desaparecida en Caldas).
Un habitante de Irra, corregimiento de Quinchía, Risaralda, se comunicó en la mañana con la Policía, para informar que había visto un cadáver bajar por esa arteria fluvial. Las autoridades acudieron para llevarlo a la orilla y, al ver las características físicas y el vestuario, llamaron a la señora María del Socorro Jaramillo para hacer la identificación.
La niña había salido de su casa aguas arriba –en Arauca, corregimiento de Palestina, Caldas– para hacer un mandado el martes hacia las 10:00 a.m. y pasó 48 horas desaparecida antes del hallazgo. En ese lapso, toda clase de teorías se habían escuchado sobre su paradero, pero ninguna confirmada.
“En el momento en el que tengamos cualquier información, se las haremos saber para que ustedes nos puedan seguir colaborando, porque las cosas no se pueden quedar así”, le dijo Myriam Jaramillo, tía de Mariana, a EL TIEMPO, poco después de las 5:00 p.m.
Sobre esa hora llegó el cuerpo a la sede en Manizales del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses. Esta entidad será la encargada de hacerle los exámenes pertinentes al cuerpo, para determinar en qué circunstancias murió la niña y cómo llegó al río en el que apareció unos 30 kilómetros abajo de donde vivía.
“Lo que demora el dictamen solo se sabrá cuando el perito asuma el caso, pero ya no alcanza a ser hoy (jueves)”, explicó la médico forense Lina Mercedes Patiño, en el momento que se hacía el ingreso del cadáver al Instituto. Entre tanto, es imposible especular sobre los detalles de la muerte de Mariana.
No obstante, en respuesta a los mensajes que su familia puso a circular en redes sociales para buscarla, varios desconocidos se comunicaron por teléfono para dar diferentes ubicaciones donde creían haberla visto, incluso acompañada. Pero, tras un trabajo de verificación, el Gaula descartó varias de esas teorías.
El comandante de la Policía en Caldas, coronel Lincoln Borja, afirmó que la institución lamenta la muerte de la niña y conformó un equipo interdisciplinario, con psicología y trabajo social, para acompañar a la familia en el duelo.
MANIZALES