La Sociedad Portuaria de las Américas no asistió a la citación que hizo este miércoles el Concejo de Santa Marta para que resolvieran los interrogantes sobre la
construcción y operación de un puerto para el cargue y descargue de graneles líquidos, ubicado a escasos dos kilómetros de la bahía de Taganga.
Los pobladores del corregimiento se oponen por considerar que afectará la actividad turística y pesquera y que podría causar afectaciones ambientales en los ecosistemas marinos.
El gerente de la Sociedad, Carlos José López, se excusó a través de una carta por no poder asistir y expresó su voluntad de hacerlo a partir del próximo primero de agosto, cuando el Concejo ya no está sesionando.
El concejal Jaime Linero, proponente de la citación, dijo que esta es la segunda vez que los citan al Concejo y no asisten. “Si bien es cierto no son funcionarios del Distrito, hoy considero que son sujetos de control político en razón de que se va a construir un puerto que de una u otra forma podría impactar negativamente en las playas de Taganga y el Distrito de Santa Marta”, expresó.
En la sesión, el director del Departamento Administrativo Distrital del Medio Ambiente (Dadma), Jaime Avendaño, dijo que la entidad, a través de la Resolución No.028 de 2007, le otorgó licencia ambiental a la Terminal de Graneles Líquidos del Caribe (Terlica) en 2007 para la construcción y operación de un atracadero para insumos líquidos por un término de cinco años, la cual fue modificada mediante la Resolución No. 142 de 2010 que amplió el término a 20 años.
“La autoridad ambiental no otorgó una licencia para la construcción de un puerto, sino de un atracadero, eso tiene otras connotaciones. El atracadero son lugares donde pequeñas embarcaciones pueden llegar a costa y resguardase y solamente con lo que tiene que ver con insumos líquidos relacionados con el aceite de palma, de ninguna forma con hidrocarburos”, aclaró Avendaño.
La Sociedad Portuaria Las Américas obtuvo la concesión para la construcción, administración y operación, otorgada por la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) en septiembre de 2015 por 20 años y debido a que también va a movilizar hidrocarburos y derivados del petróleo solicitó la modificación de la licencia y se le dio traslado a la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla), que es la que tiene la competencia.
El representante de la Veeduría Ciudadana de Taganga, José Cantillo, dijo que los tagangueros se oponen a la construcción de este puerto porque ya hubo dos derrames de aceite producidos por Terlica, que acabaron con los corales y los peces en la bahía de este corregimiento.
“Los tagangueros sufrieron el colapso de todas sus playas, se nos murieron los erizos de mar, hoy no contamos con todo ese sistema coralino que teníamos (…) Taganga si se hace ese muelle se muere, la población va a desaparecer”, expresó Cantillo.
En su intervención, Avendaño dijo que la Sociedad Portuaria de las Américas ha cometido varios errores y uno muy notorio es la poca o nula información que tiene la comunidad cercana al desarrollo del proyecto, lo cual ha generado su inconformidad. “Un proyecto que tiene implicaciones en el entorno de una comunidad debe ser socializado y llevado a un consenso. Si no hay consenso, el proyecto no se desarrolla”, expresó.
PAOLA BENJUMEA BRITO
Redactora de EL TIEMPO
SANTA MARTA