El subdirector de la Oficina de La Naciones Unidas para la Droga y el Delito en Colombia (UNODC por sus siglas en inglés), Leonardo Correa, se reunió con las autoridades de Caldas para evaluar la situación después de que se hallaran nuevos cultivos de coca en el departamento. El funcionario resaltó que la certificación sigue vigente y que la misma ONU acompañará los procesos que eviten el resurgir de estos cultivos.
“La certificación sigue vigente y tiene más sentido que nunca, porque el hecho de que haya sido la comunidad la que denuncia y que las autoridades reaccionaran rápido y procedieran a erradicar manualmente, hace ver que se otorgó basándose en patrones correctos”, afirmó Correa.
De acuerdo con la UNODC, aunque es la primera vez que se pone en funcionamiento el sistema de monitoreo posterior a una declaratoria, la evaluación es positiva. “En menos de un mes se han hecho más de 18 horas de sobrevuelos, ya se hizo erradicación manual y estamos trabajando en identificar cuáles son los factores que hacen que aparezca nuevamente el interés de narcotraficantes en el territorio.
También se están fortaleciendo las relaciones de la fuerza pública con las comunidades, cosa vital para estar enterados de la situación real”, apuntó el delegado.
Tras la denuncia de presencia de cultivos de coca en veredas del municipio de Samaná, oriente del departamento y una de las zonas más afectadas por el conflicto en Caldas, se encendieron las alarmas, pues según la misma UNODC, el riesgo de resiembra no desaparecerá.
“El riesgo va a ser permanente, igual que en otros territorios del país, pues en Colombia el 70 por ciento de tierras tienen condiciones propicias para la siembra y Caldas está en una zona que para el narcotráfico es estratégica. Eso tenemos que contrarrestarlo a través de una correcta presencia institucional y la construcción de canales de confianza con la gente, como es el que evidenciamos que se da acá”, precisó el subdirector.
A esta reunión asistieron también delegados del Ministerio de Justicia, los comandantes del Ejército y la Policía del departamento y el secretario de Gobierno de Caldas, quienes -conjuntamente- decidieron algunas tareas con miras a trabajar en que la coca no regrese.
“Dentro de los compromisos está garantizar que la zona tenga más pie de fuerza, esto gestionando unos terrenos para construir una base militar. También que el Ministerio de Justicia convoque a varios gobernadores para que conozcan la experiencia y se pueda hacer un trabajo conjunto”, señaló el secretario de Gobierno de Caldas, Carlos Piedrahíta.
LAURA USMA CARDONA
PARA EL TIEMPO - MANIZALES