El ‘aguinaldo’ que recibieron los cafeteros colombianos: la aprobación en el Congreso de la República de una reducción de impuestos, fue recibido con beneplácito por los productores del grano en Risaralda.
Alejandro Corrales, miembro por Risaralda en el Comité Nacional de Cafeteros de Risaralda, afirmó que el reconocimiento como costo presuntivo de mano de obra para efectos de la depuración del impuesto de renta del 40 por ciento de los ingresos de los productores, “es un propósito que veníamos trabajando desde hace mucho tiempo”.
“Básicamente -explicó Corrales- consiste en que el Gobierno, la Dian, nos reconocen el 40 por ciento de las ventas brutas como costo de la mano de obra”, y agregó que la medida “hace honor a una realidad de informalidad que tenemos en el sector y que hace imposible para un caficultor asumir los costos de formalización laboral”.
Resaltó que es el inicio de la formalización de la caficultura. “El gremio demostró con cifras y argumentos técnicos y económicos que los costos de mano de obra existen, que son en promedio un 40 por ciento de las ventas brutas y que no los podíamos deducir, ni presentar ante el Gobierno en las declaraciones de renta por la gran inestabilidad y migración de nuestra mano de obra”.
La inmensa mayoría de los trabajadores de la caficultura son temporales, solamente están en el épocas de cosecha del grano.
La proposición para la exención del gravamen la presentaron el representante a la Cámara Hernán Penagos Giraldo y el Senador Carlos Felipe Mejía Mejía. Los dos son caldenses.
‘Es lo justo’Por su parte, la Federación Nacional de Cafeteros informó que la disminución de los impuestos “tendrá como efecto lograr una tributación justa y acorde con la realidad del campo colombiano”.
Añadió que el texto aprobado implica que para la determinación del costo en los cultivos de café, se presume de derecho que el cuarenta por ciento del valor del ingreso gravado en cabeza del productor, en cada ejercicio gravable, corresponde a los costos y deducciones inherentes a la mano de obra.
Si bien hace falta conciliar los textos aprobados en la Cámara de Representantes y el Senado para conocer la versión final, la Federación Nacional de Cafeteros puntualizó que este será un beneficio para las 500 mil cafeteras del país.