Un sentimiento de preocupación manifestaron diversos gremios y autoridades locales del área metropolitana de Cúcuta frente al anuncio del cierre total del puente Mariano Ospina Pérez que se tiene previsto para el próximo 10 de marzo, como parte de las obras de reforzamiento estructural que se adelantan sobre este paso elevado.
De acuerdo con el concesionario San Simón -el contratista de la obra-, la restricción se prolongará hasta el 14 de abril, tiempo en el que se realizará el cambio de la loza de la estructura, que de no hacerse podría ocasionar el rompimiento del tramo vial que une a la capital nortesantandereana con el occidente del departamento, la Costa Atlántica y el centro del país.
Al anuncio le llovieron críticas y cuestionamientos por parte de líderes gremiales y entidades como el Instituto Nacional de Vías (Invías), que advirtieron sobre el mal estado de las vías y la inseguridad en los corredores por donde se hará el desvío para los 12.000 automotores, entre vehículos de carga y carros particulares, que transitan diariamente por este puente.
"La vía Urimaco – La Termo es una vía que se encuentra en pésimas condiciones. Los gremios y los transportadores se han quejado. Lo que se pretende es que con una inversión de 1.000 millones de pesos provenientes de la Gobernación se pueda hacer los arreglos necesarios antes del 10 de marzo para dar paso para los vehículos pequeños”, aseguró el director territorial del Invías, Jesús Vergel.
Del mismo modo, la Secretaría de Infraestructura departamental destinará 500 millones de pesos para adecuar los 87 kilómetros de la vía Cúcuta-Puerto Santander-Puerto León- Agua Sal y concentrar sobre este corredor el comercio terrestre de cerámica, carbón, petróleo y productos textiles.
Frente a la problemática de inseguridad, agremiaciones encabezadas por la Cámara de Comercio de Cúcuta organizarán un encuentro entre los alcaldes del área metropolitana, el Ejército y la Policía para solicitarque se redoble el pie de fuerza en estas carreteras.
La intervención del puente Mariano Ospina Pérez, que comenzó el pasado 23 de diciembre y contempla un plazo de seis meses, consiste en recubrir la fachada del puente con un metal más resistente y en fortalecer los pilares de su infraestructura, mejorando sus puntos de anclaje con el montaje de nuevos cables tirantes. La obra tiene un costo superior a los 2.000 millones de pesos.
CÚCUTA
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