En un operativo desarrollado en la vereda Cuchiquira, ubicada a 20 minutos del perímetro urbano del municipio de Mogotes (Santander), la Policía Nacional, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, capturó a siete personas tras la ubicación de un sitio un yacimiento clandestino donde se ejercía la explotación ilegal de material de arrastre.
El impacto ambiental a raíz de la extracción de arena de una cantera estaba afectando la vegetación endémica de la región y destruyendo la biodiversidad del entorno, lo que produce erosión sobre el área adyacente a los afluentes hídricos y causa un grave daño en las principales corrientes de agua de la zona, como lo confimó un concepto técnico emitido por la Corporación Autónoma Regional de Santander (Cas).
Los capturados fueron sorprendidos mientras extraían el material de arrastre, para lo cual utilizaban chorros de agua a presión. En el lugar también se incautaron elementos y maquinaria amarilla avaluados en 235 millones de pesos.
Según informó la Policía, la actividad afectó a la comunidad del municipio por la contaminación de las aguas residuales que se vertían sobre los cauces.
Más de 60 familias de las veredas Oratorio y Monótonos, quienes derivan su sustento diario de estas aguas, denunciaron la explotación que se venía ejerciendo y la afectación que estaba dejando en sus comunidades, hecho que desencadenó el operativo que produjo las capturas.
"Con el lavado de la peña extraían los agregados que se necesitaban para su aprovechamiento ilícito, de esta manera, el agua ya desechada, salía contaminada con sedimentos y con otros minerales que afectaban su consumo. El agua cristalina que venían utilizando los habitantes de ese sector se transformaba en agua contaminada no apta para el uso", explicó el coronel Jaime Alberto Escobar, comandante de la Policía de Santander.
BUCARAMANGA