La obra de Débora Arango es sinónimo de rebeldía. La crítica sociopolítica que hacía, además de los desnudos femeninos, escandalizaron a los sectores más conservadores de la sociedad antioqueña durante la mitad del siglo XX.
Feminista, abanderada por la condición de la mujer, denunció la prostitución, la violencia, la muerte, la desesperanza y la opresión.
Sin embargo, la crudeza de sus obras generaron el rechazo de la Iglesia, que amenazó con excomulgarla. La artista antioqueña, que vivió la llegada del conservador Laureano Gómez y la violencia bipartidista materializó en sus cuadros la visión que tenía de la realidad colombiana.
“Era una mujer muy brillante que fue la mejor biógrafa de sí misma. Retrataba lo que percibía. Ponía el dedo en la llaga, veía algo que los demás no querían ver”, explicó Marta Villafañe, quien es la directora del museo Juan del Corral, en Santa Fe de Antioquia, donde se exponen 16 obras de la artista antioqueña
Nacida en el seno de una familia tradicional y conservadora antioqueña, Arango supuso un ruptura en el papel de la mujer en el arte.
Expuso por primera vez en 1937, cuando era alumna de Pedro Nel Gómez. Un año antes, el militar Francisco Franco realizó el golpe de estado, en España, el mismo que le clausuraría en Madrid, en 1955, una exposición que iba a realizar en el Instituto de Cultura Hispánica de esa ciudad.
Es por eso que la fundación Museo Juan del Corral decidió exponer ‘Los proscritos, la obra escandalosa y prohibida de Débora Arango’, una serie de pinturas y acuarelas realizadas por una de las artistas más importantes de Colombia que, por el contexto, no mostró sino hasta el final de su carrera.
Las obras tocan temas como la expresión pagana, la sátira política, la denuncia social, lo religioso y el retrato.
La exposición es un análisis de realidad social y política, que aún sigue vigente en la obra de Débora Arango. Se buscó integrar, entonces, el arte con la política.
El museo Juan del Corral ha tenido desde sus inicios el ideal de convertirse en un centro de desarrollo cívico y cultural en la región, salvaguardando el patrimonio artístico del país.
Fue creado por la Ley 150 de 1960 que declaró Patrimonio de la Nación el casco histórico del municipio y que, además, creó el museo.
Pero no fue sino 10 años después, en 1970, cuando finalmente abrió sus puertas al público en el municipio antioqueño.
Sin embargo, en 1996, cerró por falta de recursos y por la precariedad de las instalaciones físicas.
Se reabrió en el 2008 y, desde entonces, no ha cerrado sus puertas, trayendo obras de artistas como Pedro Nel Gómez, Hugo Zapata, Beatriz González y Ethel Gilmour, artista ‘naif’ norteamericana, que acompañará la exposición de Arango.
El recinto cuenta con talleres, ocho exposiciones permanentes, al menos una exposición temporal, conciertos en Semana Santa, clases de coro, entre otros.
Para Villafañe, las obras, a pesar de tener más de medio siglo de antigüedad, siguen vigentes.
“La obra es igual de fuerte porque la situación no ha cambiado. Es la misma guerra, la misma hambre, la misma miseria de mujeres prostituídas y hombres envilecidos en comprar mujeres. Es el mismo clamor”, añadió Villafañe.
Jonatán Andrés Valderrama, coordinador de la actividad artística y cultural del museo, dijo que los cuadros de Débora son obras escandalosas y estigmatizadas que aún generan impacto.
“A pesar de que la sociedad ha cambiado la mentalidad en 50 años, aún sigue teniendo un velo. La gente no expresa de manera abierta sus opiniones e incluso en este momento se puede sentir, vivir o percibir que la gente tiene mucho cuidado en decir algo”, opinó Valderrama.
La exhibición se realiza a propósito del Mes del Patrimonio Cultural Colombiano, una iniciativa del Ministerio de Educación que, desde 1998, busca salvaguardar las manifestaciones culturales que están dentro del país.
Por eso, “además de celebrar el Mes del Patrimonio, que se celebra en septiembre, la idea también es traer a la comunidad de Santa Fe de Antioquia a Débora Arango para que la conozcan y sepan qué hizo. Ella pintaba lo que veía. Una obra que incluso hoy genera polémica”, añadió Valderrama.
La exposición se inaugurará el próximo sábado, pero ya está abierta al público. Estarán obras como La danza, Acuarela, El cementerio de la chusma, Melgar, Doña Berta, entre otras 11. La muestra irá hasta el 30 de octubre.
Actualmente, unas 400 personas se han acercado al museo para disfrutar de la obra de la artista.
Los organizadores estiman que al menos 8.000 personas visitarán la exposición.
La entrada a la exposición, así como a los eventos del museo, es gratis, con la intención de fomentar el arte y la cultura en Santa Fe.
Jesús de León
EL TIEMPO
jesver@eltiempo.com