Más de 3.000 campesinos de ocho veredas alejadas del municipio de Valdivia (Antioquia) se beneficiarán de la vía que construyen ingenieros militares de la Séptima División del Ejército, que acortará la distancia con los centros poblados.
Esa vía les facilitará la comercialización de su producción agrícola y la sustitución de cultivos ilícitos.
Precisamente, el aislamiento, el difícil acceso al casco urbano se convirtió en la oportunidad y la presión de los grupos armados ilegales para enganchar a los campesinos para que sembraran coca. El Ejército informó que maquinarias y hombres del batallón General Pedro Nel Ospina, de la Cuarta Brigada, trabajan en la apertura del camino Monteblanco, La Esperanza, para dejar instalada una vía de 25 kilómetros.
“La obra es el resultado de la solicitud expresa que hizo la comunidad, afectada por los cultivos de coca, a la Séptima División del Ejército, en el sentido de su voluntad de sustituir los cultivos ilícitos por legales, pero la dificultad de hacerlo por el nivel de aislamiento en el que se encontraban”, agregaron voceros del Ejército.
La apertura de esta vía lleva esperanza, desarrollo y oportunidades a los campesinos porque conectará las veredas La Siberia, Monteblanco, La Candela, Venecia, La Esperanza, Juntas, Montefrío, Génova y Puquí Arriba con la cabecera municipal.
Para llegar a la vereda La Esperanza era necesario tomar un camino de herradura y transitarlo por seis horas a lomo de mula, cuando las condiciones climáticas no eran adversas; en un territorio que en el pasado sufrió directamente los dolores del actuar delictivo de los grupos armados ilegales, entre ellos una masacre en la vereda La Junta (1996).
Con la vía este trayecto tomará una hora, en vehículos, lo que facilitará la comercialización de sus nuevos cultivos y les acercará a servicios de bienestar y supervivencia que ofrece la Administración.
MEDELLÍN