Para los consumidores actuales que buscan vivienda, ya no se trata solo de un espacio para vivir. Sino de que ese espacio se adapte a su estilo de vida.
Con esa tendencia, Medellín comienza a ganar terreno en las construcciones sostenibles que busquen certificación LEED (Leadership in Energy & Environmental Design), es decir, un sistema de certificación de edificios sostenibles.
Entre el 19 y el 21 de este mes, el Salón del Inmueble se enfocará en este tipo de ofertas inmobiliarias que irán desde los 4 millones de pesos el metro cuadrado en adelante.
Serán cerca de 120 proyectos inmobiliarios entre vivienda, hoteles, locales, oficinas, consultorios y lotes.
La certificación LEED valida las eficiencias en el consumo de los servicios públicos, asegurando una mejor calidad de vida, sin mayor costo
Pero más que el precio, sobresalen los proyectos que le apuestan a temas como: conservación de bosques naturales, construcción de huertas urbanas, diseño de estructuras sostenibles y certificación LEED.
“Uno de los que sobresale en esta versión es ‘Verde Vivo’, un proyecto que solo utiliza el 12 por ciento del lote para construir, reforestando y protegiendo el bosque original”, explicó Clara Inés Ferrer, directora de Ferias de Camacol Antioquia.
Dicho proyecto, continuó la experta, cuenta con un espacio para huertas urbanas y con un sistema de recolección de aguas lluvias para el riego de las zonas comunes.
“Esta certificación validaría las eficiencias en el consumo de los servicios públicos, asegurando una mejor calidad de vida, sin mayor costo”, indicó Ferrer.
Hay proyectos que solo utilizan hasta el 20 por ciento del total del lote
Cortesía Camacol
Para ella, los constructores en la región están preparados para este tipo de iniciativas pues se vienen desarrollando desde hace años, pero apenas ahora se está visibilizando por el tema de la calidad del aire del área metropolitana.
Este fenómeno de construcciones sostenibles, agregó Ferrer, está tomando fuerza en sectores el sur del valle de Aburrá y el Oriente antioqueño.
Sin embargo, en barrios tradicionales como Laureles, se están desarrollando proyectos mediante renovación urbana que buscan, precisamente, tener inmobiliarios sostenibles para evitar que toda la construcción se vaya a las laderas.
La tendencia son proyectos que se asemejan a un club campestre porque pueden tener en el mismo espacio, recreación, deporte, comercio y entretenimiento
Otro aspecto relevante es pensar en la calidad de vida, pues los inmuebles se adaptan al estilo de vida de las personas. “Por ejemplo, tenemos proyectos de vivienda especializados para personas activas, mayores de 50 años, otros proyectos que se asemejan a un club campestre porque pueden tener en el mismo espacio, recreación, deporte, comercio y entretenimiento. Son apartamentos con servicios hoteleros”, contó Ferrer.
En este tipo de oferta inmobiliaria, la más deseada es la vivienda con 86 por ciento, seguido de lote con 6 por ciento, y finalmente bodega, local y oficina con 2 por ciento cada una.
En cuanto a zonas para inversión, las preferidas según datos de Camacol son: El Poblado (31 por ciento), Envigado (24 por ciento); Oriente antioqueño (13 por ciento) y Laureles (10 por ciento).
Aclaró la directora, que todos los negocios que se firmen este año no se les cobrará el IVA del 5 por ciento a los proyectos de 800 millones de pesos en adelante que fijó la reforma tributaria, “por lo que este evento se vuelve muy oportuno para quienes deseen hacerlo”.
MEDELLÍN
Comentar