La situación de las cárceles de Antioquia preocupa, tanto que solo hay centros de reclusión en 15 de los 125 municipios y estos están en situación precaria, con alto hacinamiento, daños en la infraestructura y sin condiciones de seguridad.
La secretaria de Gobierno del departamento, Victoria Eugenia Ramírez, explicó que la Gobernación tiene un problema histórico, por lo que buscan estrategias de solución. “El problema más grande es el hacinamiento, que alcanza el 70 por ciento. La capacidad de todas las cárceles del departamento es para 8.118 personas, pero actualmente hay 13.825”, precisó la funcionaria.
A lo que se le suma, explicó la funcionaria, que en los centros de reclusión hay ‘pico y placa’ para poder dormir.
La cárcel más hacinada es la de Andes, tiene 248 por ciento, seguida de El Reposo, en Apartadó con 240 por ciento.
Entre tanto, el diputado Saúl Úsuga, quien estudia los derechos en las cárceles, explicó que muchos presos lavan en los deteriorados orinales sus manos y sus platos, pero además hacen sus necesidades fisiológicas en la misma zona donde duermen.
De acuerdo con los datos del diputado, los casos más graves están en Bellavista, construida para 2.224 personas y tiene 5.872 internos; así como El Pedregal, con capacidad para 1.150 reclusos y hay 2.232 presos, y La Paz, de Itagüí, hecha para presos de Justicia y Paz, que hoy tiene condenados y sindicados. “Fue construida para 328 presos y terminó 2016 con 1.171”, precisó el político.
La cárcel más hacinada es la de Andes, tiene 248 por ciento, seguida de El Reposo, en Apartadó con 240 por ciento, y la de Itagüí con 209 por ciento.
Jorge Carmona, defensor de Derechos Humanos de los reclusos, explicó que esta situación afecta a las 21 estaciones de Policía de Medellín, donde hay
más de 1.000 personas, muchos llevan hasta un año a la espera de que los trasladen, cuando son sitios de paso.
MEDELLÍN
