La actividad se realiza cada jueves y es promovida por dos fundaciones.
Hace tres o cuatro años, en ciudades como Bogotá y Medellín, inició el auge de los llamados 'aguapaneleros’, quienes suministraban ayuda a los habitantes de la calle en la noche. Con el tiempo, la iniciativa ha logrado transformarse y complementarse.
La actividad se realiza cada jueves y es promovida por dos fundaciones.
'Tomémonos un Chocolate’ es la campaña de las dos fundaciones y lleva cinco años movilizándose por las calles de la capital de Antioquia, desde la estación Cisneros hasta los sectores de Niquitao, Veracruz y La Minorista, zona céntrica de la ciudad.
La actividad se realiza cada jueves y es promovida por dos fundaciones.
La actividad ‘Tomémonos un Chocolate’ es un espacio en el que los habitantes de la calle comparten, además de sus experiencias, pan y chocolate con sus compañeros. También es normal que prostitutas y madres con niños de brazos se acerquen para pedir ropa y comida.
La actividad se realiza cada jueves y es promovida por dos fundaciones.
La cita se da cada jueves en los bajos de la estación Cisneros del Metro, a la que llega un grupo de jóvenes voluntarios cargando uno o dos bultos repletos de panes y tres garrafas lecheras con un chocolate tibio.
La actividad se realiza cada jueves y es promovida por dos fundaciones.
Según Javier Ruiz, director de Visibles, los habitantes de calle son aquellos que no tienen ninguna red de apoyo (ni familia, ni vínculos laborales). Entretanto, los que están en situación de calle poseen un lugar donde dormir en ocasiones, algún trabajo informal o un familiar que los ayuda.
La actividad se realiza cada jueves y es promovida por dos fundaciones.
Visibles ideó un programa innovador, en el que la escucha es el eje fundamental de todos los jueves, al ver las necesidades de este grupo de personas olvidadas por la sociedad.
La actividad se realiza cada jueves y es promovida por dos fundaciones.
Para los voluntarios que participan en el proyecto cada uno de los habitantes tiene algo para contar y el encuentro con ellos se presta para más que un chocolate.
La actividad se realiza cada jueves y es promovida por dos fundaciones.
Cada uno de los voluntarios tiene una tarea específica dentro del programa. Sin embargo, lo esencial es brindarles tiempo y trabajar en conjunto con estas personas.