Con pancartas y consignas, durante dos horas, organizaciones defensoras de animales y ambientalistas rechazaron el martes la muerte de un oso de anteojos en el departamento de Nariño y pidieron investigar el hecho y sancionar los responsables.
La muerte del animal se conoció el pasado viernes cuando en el municipio de La Cruz, en una bolsa plástica, fue hallada la mano de un oso de anteojos, acompañada del mensaje: “Ya son 2 en 5 días, los vamos a acabar a todos”.
Desde el mismo día la situación generó rechazo entre la población y en diversos estamentos de Nariño.
“Nos duele esta situación y no se debe repetir”, expresó Socorro Realpe, docente de la Institución Educativa de Bachillerato de La Cruz.
El plantón se llevó a cabo en el parque del barrio Santiago, de Pasto, donde líderes ambientalistas exigieron a las autoridades la conservación y protección del oso como una especie en vía de extinción.
Conocedora del complejo natural volcánico Doña Juana, donde fue encontrado el oso, Realpe califica el lugar como de una flora exquisita y abundante, “pero debemos cuidarlo, hace parte de nuestro patrimonio natural”.
La Fundación Natura que hace más de 10 años trabaja en la defensa de los animales en Nariño, acompañó el plantón y su representante Olga Ortega dijo que todas las especies de la fauna silvestre son reguladoras de los ecosistemas como es el complejo natural Doña Juana.
“El oso andino es diseminador de semilla, contribuye a fortalecer el bosque que nos da el agua y el agua nos da la vida”, manifestó y expuso que matar esta especie pone en grave riesgo la naturaleza.
Reprochó que las autoridades están dejando solos a los animalistas, que realizan un trabajo ad honorem.
“Queremos llamar la atención de la comunidad para abordar esta temática que es crucial, y que las autoridades ejerzan una mayor autoridad en zonas donde habita el osos”, recalcó.
Ortega indicó que también el jaguar que se ha visto acorralado en los ecosistemas.
En el evento se puso de presente que las comunidades asentadas en los ecosistemas ampliaron sus fronteras para la práctica de la agricultura y la ganadería.
“No es el oso andino, ni es el jaguar el que ataca a las comunidades, son los humanos los que invaden y reducen sus espacios”, recalcó Ortega, quien exigió un mayor compromiso de la Corporación Autónoma Regional de Nariño (Corponariño), la Policía Ambiental y Parques Nacionales.
Germán Bastidas Patiño, profesional de Corponariño, expuso que se tiene una estrategia para conservar el oso andino, “pero la comunidad está exigiendo que se tomen medidas por la presencia del oso que ataca la ganadería”.
En tal sentido la propuesta fue comprar predios en las zonas altas para conservar su hábitat, “pero la gente no estuvo conforme con la propuesta”, agregó.
Y señaló que la muerte del oso en La Cruz es objeto de investigación por el organismo y dar con los responsables, porque se trata de un delito ambiental grave toda vez que el oso de anteojos es considerado una especie en vía de extinción
PASTO
Comentar