Pasto. Unas 90 veredas ubicadas en las riberas del Bajo y Alto Mira, zona rural de Tumaco, quedaron inundadas por la creciente del río Mira.
Desde la madrugada del lunes el desbordamiento del río Mira mantiene aislados a unos 5.000 pobladores que derivan su sustento de la agricultura y la pesca, productos que no han podido sacar hasta los centros de consumo en Tumaco, Túquerres y Pasto por falta de vías de comunicación.
“La gente no ha podido movilizarse porque los carros no están saliendo debido a que todas las vías de penetración se encuentran inundadas y los transportadores no se atreven a prestar el servicio”, dijo Luis Donald Rodríguez, uno de los líderes de esta región distante dos horas del perímetro urbano de Tumaco.
Aunque no se reportaron víctimas, los animales y cultivos como el cacao y plátano son los más afectados.
Las aguas ingresaron en mayores proporciones a Cajapí, Bocas de Cajapí, Bajo y Alto Jagua, San Isidro, Bocatoma, veredas del Bajo Mira.
El coordinador de Gestión del Riesgo de Desastres de Tumaco, Roberto Cuero, dijo que en las últimas horas el invierno en la zona había disminuido, pero las autoridades y los organismos de socorro mantienen el control y monitoreo.
“Si la creciente del río es como la sucedida en el 2009, cuando hubo cientos de familias damnificadas, entonces tenemos que intervenir”, dijo el funcionario.
"No hemos tenido destrucción de viviendas, pero si se han visto perjudicados algunos cultivos", precisó el funcionario, quien recalcó que las inundaciones también obedecen a la imprudencia de los campesinos que deciden construir sus viviendas a orillas del río Mira.
En la primera evaluación que se realizó el pasado lunes se determinó que la zona comprendida entre el Bajo Mira y la Frontera es donde las aguas penetraron en mayor volumen a áreas habitadas; el ingreso a las veredas Imbilí, Peñas Coloradas, Los Guachales, Los Guabos y El Descolgadero se tornó muy difícil.
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