Hay conmoción en la comunidad caleña por la profanación, en la madrugada de este miércoles, de la iglesia de la Ermita, uno de sus templos religiosos más importantes y visitados de la ciudad.
Se trata de un intento de asalto por parte de un hombre de 22 años quien, equipado con un laso y un puñal, entró al templo dañando uno de los vitrales de la parte superior, y se apropió de las limosnas, además de otros objetos de valor.
Las autoridades lograron recuperar las limosnas que dieron los fieles.
Archivo particular
En el momento que intentaba escapar por el mismo sitio donde ingresó, el laso se le reventó al sujeto en la parte exterior de la iglesia, cayendo desde el segundo piso con el botín.
Allí se clavó el puñal que llevaba para defenderse en una pierna, siendo trasladado al hospital San Juan de Dios.
Según el médico Iván Gonzáles, director de este centro hospitalario, el hombre que tenía una herida superficial de dos centímetros.
Este es uno de los vitrales que dañó alias Rasputín. Tiene más de 300 años
Archivo particular
Este sujeto, quien fue identificado por las autoridades como Harold Noguera, es conocido como Rasputín, de quien también se encontró rastros de sangre en el piano y otros instrumentos dentro de la iglesia, pues se habría cortado en el momento de cometer el ilícito. En las próximas horas será judicializado.
Este fue el laso que se le reventó al hombre en el momento de su escape.
Archivo particular
Por su parte el párroco encargado de la emblemática iglesia denunció que los daños en los vitrales, que representan a los santos apóstoles, son millonarios e irreparables pues tienen una antigüedad aproximada de 350 años, además que fueron traídos directamente de Holanda.
CALI
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