Los empresarios del Valle son optimistas frente a las ventas, la generación de empleo y la situación económica del departamento al cierre del año, según la ‘Encuesta Ritmo Empresarial’ de la Cámara de Comercio de Cali.
El 61,1 por ciento de los empresarios afiliados a las Cámaras en el Valle espera incrementar el valor de sus ventas, el año pasado ese porcentaje era del 54,2 por ciento. Donde las expectativas son aún mayores son en Tuluá con el 76,5 por ciento y en Sevilla con el 71,7 por ciento.
Un 93,3 por ciento proyecta mantener, incluso, aumentar el número de trabajadores en esta segunda mitad del año. Tuluá, seguida de Cali y Buenaventura son los municipios que más esperan aumentarán su planta de colaboradores.
Respecto al panorama de la economía regional, el 44,3 por ciento de los empresarios confía en que mejorará o estará mucho mejor en este segundo semestre.
Hace un año, las expectativas eran menores, solo el 37,7 por ciento proyecta un mejor clima de negocios.
Durante el primer semestre, según la Encuesta, el 28,1 por ciento de las empresas aumentó el valor total de sus ventas, por debajo del 31,7 por ciento registrado en igual periodo del 2015. No obstante, en Tuluá, con el 44,1 por ciento, y en Cali, con el 38,6 por ciento, las ventas tuvieron un mejor comportamiento en el primer semestre.
Los empresarios de la minería, industria y agropecuario fueron quienes reportaron un mejor desempeño en sus ventas.
“Estos resultados se ajustan a las expectativas, en la medida que el peso colombiano se ha devaluado en los últimos dos años favoreciendo la producción local, vía sustitución de importaciones”, según los técnicos de la Cámara de Cali.
Pese al aumento sostenido en la tasa de interés durante los últimos siete meses, el 32,4 por ciento de los empresarios consultados dijo haber realizado algún tipo de inversión durante el primer semestre y el 33,9 por ciento de las empresas reinvirtió utilidades.
El 13,9 por ciento de las empresas indicó que su planta de trabajadores creció en el primer semestre.
Entre los mayores problemas que enfrentaron el sector agropecuario y minero fue el paro camionero, y la industria, construcción y comercio el tipo de cambio.