El último viernes de cada mes se reunirá la mesa de trabajo de los representantes de las escuelas de salsa y asociaciones en Cali, y de Delirio con las secretarias de Cultura de la capital del Valle del Cauca, Luz Adriana Betancourth, y la del departamento, Isabel Cristina Restrepo.
También estarán Luz Adriana Latorre, gerente de la Corporación de Eventos, Ferias y Espectáculos de Cali (Corfecali) y si no viene la ministra de Cultura, Mariana Garcés, lo hará un delegado de su despacho para empezar a construir la política pública que las escuelas y más de 6.000 bailarines en la ciudad han venido reclamando para asegurar su permanencia y no corran riesgos de cerrar puertas por no tener suficientes recursos, como ha venido ocurriendo en los últimos años.
Así lo definieron los delegados de estos estamentos, ayer en una reunión en la Secretaría de Cultura de Cali para fijar el rumbo al futuro de la salsa.
Representantes de las escuelas, como Carlos Fernando Trujillo, fundador de Rucafé; Carlos Estacio, de Acrosalsa Latina; Luz A. Moncayo, de Son de Luz; Andrea Buenaventura, de Delirio; el investigador Alejandro Ulloa; y las secretarias de Cultura coincidieron en que se necesita una política pública. Ulloa, por ejemplo, dijo que es necesaria una pedagogía sobre dicha política, mientras que Betancourt habló de aprovechar el talento para una industria cultural y Restrepo se refirió a la importancia de la caracterización de las 127 escuelas, para empezar a trazar lineamientos.
La ministra Garcés y la secretaria de Cultura del Valle dijeron que avanzan en la consolidación del proyecto del Centro de Danza y Coreografía del suroccidente del país, pero no solo para la salsa, sino para todo tipo de manifestación cultural del Valle. Según Restrepo, el Centro de Danza funcionará en Cali, aunque aún no se ha establecido la inversión que podría ser superior a 6.000 millones de pesos que fue la cantidad que la Nación ofreció cuando la anterior Alcaldía hablaba del proyecto del Bailódromo, el que había prometido el presidente Juan Manuel Santos en una visita, en 2013, cuando Adriana Ávila y Jéfferson Benjumea fueron los campeones en baile deportivo de los Juegos Mundiales.
La Ministra reiteró que el Bailódromo que presentó el entonces alcalde Rodrigo Guerrero a la Nación fue un proyecto de renovación urbana, en el Corredor Verde. “Pero el presupuesto era de 268.000 millones de pesos que es el presupuesto de todo el Ministerio. Cali malentendió lo que dijo el Presidente. Dijo un proyecto para la danza”.
Así que el Bailódromo quedaría descartado, solo si se realizara una alianza público-privada, como ayer lo volvió a aconsejar la ministra Garcés.
Ahora el Centro de Danza y Coreografía podría estar ubicado en las antiguas bodegas de la Licorera del Valle, como lo señalaron extraoficialmente fuentes en el departamento y en el municipio pero, como lo dijo la Secretaria de Cultura de la región, el proyecto no se ha configurado totalmente.
La Ministra enfatizó en la necesidad de saber cuántas de las 127 escuelas de salsa que la Secretaría de Cultura de Cali tiene reportadas, alcanzan estándares de calidad, pues dijo que le preocupa el balance del Salsódromo pasado en la Feria y el Mundial de Salsa, opinión en la que coincidió la secretaria de Cultura del Valle, sobre todo, por el evento de apertura en diciembre.
La secretaria Betancourth defendió el aporte social de las escuelas y dijo que sí hay calidad. Anotó que el problema radica en la asistencia del público al Salsódromo. Dijo que, además, le preocupa que los artistas no tienen seguridad social, ni recursos ni para acondicionar las academias.
La gerente de Corfecali dijo, al respecto, que para la Feria del año pasado a la convocatoria del Salsódromo se presentaron 30 escuelas y aseguró que no fue sencillo escoger las 25 para el desfile.
CALI