A 60 años de prisión fue condenado Juan Carlos Sánchez Latorre, alias el Lobo Feroz, luego de que un magistrado del Tribunal Superior de Barranquilla confirmara la sentencia proferida por el Juzgado Noveno Penal de Circuito con función de conocimiento de esa ciudad.
Sánchez Latorre fue hallado culpable por los delitos de acceso carnal abusivo con menor de 14 años agravado, actos sexuales con menor de 14 años agravado y pornografía con menor de 18 años.
Contra el sentenciado se presentaron un total de 19 videos, 72 imágenes y por lo menos tres testimonios que sirvieron como las pruebas que llevaron al juez noveno del circuito de Barranquilla a proferir la condena.
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Con estas evidencias, las autoridades demostraron que en por lo menos 91 casos este sujeto, quien es programador de sistemas, abusó sexualmente de menores de catorce años y, además, realizó otros actos sexuales con niños y niñas en la capital del Atlántico.
Sánchez Latorre, de 37 años, fue mencionado por primera vez en un informe de la Interpol en México, como uno de los proveedores de imágenes de abusos de niños a Héctor Manuel Farías, otro abusador.
Archivo particular
Además, correos enviados a Héctor Manuel Farías López, miembro de una red internacional de intercambio de pornografía infantil en México, darían cuenta de que los hechos ocurrieron entre julio de 2007 y noviembre de 2008.
Una de las víctimas que testificó contra Sánchez Latorre contó que cuando tenía 13 años, hacia el 2008, se dedicaba a la venta de flores en el parque de Los Enamorados, en el centro de Barranquilla, donde el ‘Lobo Feroz’ lo interceptó y lo invitó a comer un perro caliente y una gaseosa en cercanías del centro comercial Metrocentro.
Después, lo llevó a un motel cercano junto con dos hombres. “Apenas entré al cuarto empezó a quitarme la ropa y a darme chupones mientras me amenazaba”, dijo el joven.
La víctima aseguró que fue abusado unas 15 veces en moteles de Barranquilla y Soledad. 5 en el municipio de Soledad, Atlántico.
Con estas pruebas, las autoridades demostraron que Sánchez Latorre sometía a niños y niñas a distintos vejámenes sexuales y les daba dinero con la condición de que lo gastaran en dulces o videojuegos.
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El ente acusador puso en evidencia que el hombre ubicaba a las víctimas menores de edad en lugares comerciales de alta concurrencia, las llevaba por medio de engaños a su casa y allí les hacía videos o fotografías mientras abusaba sexualmente de ellas.
Sánchez Latorre fue extraditado el 13 de septiembre de 2018 desde Venezuela, donde lo habían capturado el 29 de noviembre de 2017.
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