Una investigación adelantada por la Policía Metropolitana de Bogotá y la Fiscalía General de la Nación da pistas de qué es lo que estaría pasando en la localidad de Usme, específicamente en el sector de Yomasa, donde, desde el inicio de las marchas del paro nacional, las autoridades han tenido que hacer 57 intervenciones.
El hecho más lamentable que se ha presentado en la zona se relaciona con la muerte, el lunes pasado, del joven Jaime Fandiño, de 32 años de edad, quien recibió un impacto con un objeto contundente en el tórax, lo que le habría causado la muerte. Según familiares y testigos, la lesión la habría generado un gas lacrimógeno disparado por un funcionario del Esmad. La víctima, al parecer, iba pasando por el lugar y no participaba en los enfrentamientos. Las investigaciones están avanzando.
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“La Fiscalía estuvo en el lugar recabando información, recogiendo testimonios, hemos solicitado la mayor celeridad en este caso”, explicó el secretario de Gobierno, Luis Ernesto Gómez.
El general Óscar Gómez Heredia, comandante encargado de la Mebog, también se refirió a este hecho. “Lamentamos la muerte de un ciudadano en medio de las confrontaciones en la localidad de Usme. Sobre las 3:50 de la tarde, una persona ingresó sin signos vitales al Cami Santa Librada con una lesión en el tórax, al parecer producida por un arma contundente”, explicó el alto oficial.
La violencia que se vivió en este punto el lunes de esta semana fue planeada y ejecutada de manera coordinada, según pudieron establecer las autoridades a partir de unos audios que fueron recolectados, y en el que se estableció lo que pasaría.
“Vamos a cuadrar ese quilombo mañana con los tombos, los de Molinos, de Country Sur, no nos podemos ir hacia Molinos porque nos encierran, la idea es subir y bloquearles la Y a todos y poner quilombo con todos, armar un mierde** en el sur, que lo sientan”, dice un hombre que agregó cómo tenían que actuar.
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“La idea es hacernos sentir, acá estamos coordinando todo, pero la idea es que nos acompañen, tenemos escudos y cómo pararnos duro. Hay que darles también, aquí están relajados (los policías), de vacaciones, la idea es pararnos duro temprano, en el día”, concluye el mensaje.
Y así ocurrió. Desde las 6 de la mañana empezaron los desmanes. Incluso, algunos videos de cámaras de seguridad mostraron cómo hubo encapuchados que preparaban y lanzaban bombas incendiarias contra los uniformados. También amarraban alambres de lado a lado en las vías, para impedir el paso de uniformados motorizados.
El lunes, dos personas fueron capturadas, 27 policías terminaron heridos y, además del fallecimiento de Jaime Fandiño, hubo denuncias de excesos de la fuerza por el Esmad, que usó lacrimógenos y bombas aturdidoras para despejar la avenida Caracas.
En Usme, durante los primeros días de las marchas del paro nacional, se registró un ataque a un CAI, en el que por poco 14 uniformados son incinerados. Por el momento, las autoridades seguirán adelante con sus investigaciones. La Y de Yomasa, en Usme y los portales de las Américas, Los Héroes y Suba son sitios de vigilancia permanente, por los violentos disturbios que se han presentado.
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BOGOTÁ
EL TIEMPO
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