Bogotá, Barranquilla, Medellín y Bucaramanga fueron las principales ciudades colombianas donde migrantes venezolanos se concentraron para manifestar su rechazo al régimen de Nicolás Maduro. Frente a los consulados elevaron sus voces de protesta.
En la capital de la república fue donde más concurrencia hubo, pues a la autopista Norte con calle 104 arribaron unos 300 migrantes que durante unas dos horas, entre las cuatro y las seis de la tarde, entonaron mensajes de repudio: “¡¿Quiénes somos? Venezuela. ¿Qué queremos? Libertad!”, “Maduro: dictador, asesino, eres la plaga de Venezuela” fueron algunas de las frases que se escucharon.
Respaldados con pancartas, banderas, megáfonos y guitarras se hicieron escuchar y posaron para los medios de comunicación, que les abrieron los micrófonos.
Personas de todas las condiciones sociales, procedencias y orígenes geográficos del país vecino llegaron a ese punto del norte bogotano. Linda Guillén, por ejemplo, lleva dos años radicada en el Distrito. Es licenciada, pero se ha dedicado a la barbería para recoger dinero con qué mantener a sus hijos y mandarles ayudas a los seres queridos que permanecen en casa.
“Lo que queremos todos aquí es que ese régimen corrupto, narcotraficante y tirano se acabe. Maduro se tiene que ir, tiene que dejar de matar a los venezolanos, ya no aguanta más”, expresó Guillén.
Rafael Antonio Ortega, magistrado del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, quien fue declarado traidor por el régimen al tratar de ejecutar con independencia sus funciones, y que por eso acabó exiliado en Colombia –de lo contrario, habría sido encarcelado–, también acudió a protestar.
“No creo que la dictadura de mi país vaya a durar mucho más que un año. La comunidad internacional le ha dado la espalda a Maduro y son muchos los organismos que le han cerrado las puertas, como el Grupo de Lima, la OEA y la Unión Europea”, señaló el jurista. “Por el bien de mi país, espero que la dictadura se acabe”.
No creo que la dictadura de mi país vaya a durar mucho más que un año. La comunidad internacional le ha dado la espalda a Maduro
En Barranquilla se presentaron enfrentamientos verbales entre opositores y seguidores del gobierno bolivariano, que este jueves en la mañana tuvo nuevos actos de posesión.
Una acalorada discusión se registró en las oficinas del consulado en la capital de Atlántico, calle 70 con carrera 52, sobre el mediodía. Un grupo era el conformado por migrantes, quienes llenos de indignación y dolor se fueron lanza en ristre contra otros que lanzaban proclamas en favor del gobierno de Maduro.
“Cuánto les están pagando para que estén aquí defendiendo a ese dictador”, eran los reclamos de unos hacia otros, mientras que las respuestas de los defensores del régimen acusaban a su contraparte de traidores. La presencia de la Policía impidió que los hechos pasaran a mayores.
Mientras tanto, los manifestantes en Medellín y Bucaramanga exigieron la salida de los equipos consulares, pues para ellos, sus funcionarios no se compadecen con la situación que están pasando los migrantes que han llegado a la región, al no brindarles atención alguna.
Uno de los actos más simbólicos se vio en la capital antioqueña, donde le quitaron la octava estrella a la bandera venezolana, pues esta fue adicionada en el 2006 por el entonces presidente de ese país, Hugo Chávez.
BOGOTÁ