Ese operador, al que se le adjudicó un contrato de concesión en el 2010, como parte del SITP, había declarado estar imposibilitado para operar desde septiembre del año pasado por los efectos que han tenido en la empresa las fallas en la implementación del SITP.
Tranzit argumentó ante la superintendencia que el SITP provisional, mediante el cual se permitió que buses que no se han incorporado el sistema integrado siguieran operando, ha afectado el proceso de chatarrización de la flota a cargo de los concesionarios, pues muchos propietarios encontraron en este esquema la forma de seguir operando rentablemente sus buses. Además, los conductores de esos buses reciben los pasajes en efectivo, operan sin interventoría y constituyen una competencia por la demanda de pasajeros que afecta al resto de operadores.
Hoy día están en proceso de liquidación los operadores Egobús y Coobús, las dos primeras empresas que se quebraron. Por ahora, Tranzit sigue prestando el servicio de transporte público en la zona de Usme, con 533 vehículos programados en el componente zonal, 100 buses alimentadores y un número estimado de 194.500 usuarios al día. Tiene a su cargo 32 rutas zonales (azules) y 16 alimentadoras (verdes).
Comentar