Con fractura en los huesos nasales y heridas en el párpado izquierdo que merecieron una incapacidad de 25 días, dictaminada por el Instituto de Medicina Legal, terminó Alexandra Blandón, de 38 años, quien fue golpeada por un hombre porque el carro en el que se movilizaba obstruyó la entrada a un edificio.
De acuerdo con el relato de la mujer, el 6 de diciembre, a las 9 p. m., se dirigía a una reunión familiar junto con su esposo, que conducía el carro, y sus hijos. Sin embargo, no tomaron la ruta correcta y terminaron perdidos cerca de un conjunto residencial en la carrera 7.ª C con calle 138, en el barrio Cedritos, localidad de Usaquén.
“Entramos a una calle cerrada y, para devolvernos, teníamos que entrar a la portería del conjunto. De la nada apareció una camioneta negra que nos impidió el paso”, rememora Blandón.
Desde la camioneta, dos hombres los insultaron y los trataron de ladrones, frente a los vigilantes. Luego, un hombre que Blandón identifica como Carlos Felipe Rojas López, el presunto agresor, bajó del vehículo y lanzó monedas contra el carro de la pareja. “Mi esposo se enfadó porque algo cayó en donde estaban nuestros hijos. Él se bajó y comenzaron a pelear”.
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Los guardianes del conjunto Belmira del Country inmovilizaron a la pareja de Blandón, y ella trató de defenderlo. En ese momento, según la agredida, Rojas la golpeó en el rostro, provocándole heridas en la nariz y el párpado izquierdo.
“Recuerdo que el papá del señor Carlos –quien era el otro hombre que lo acompañaba en la camioneta– le gritaba: “Péguele, péguele para que aprenda a respetar la propiedad privada”, comenta Blandón.
Policías del cuadrante 18 acudieron al lugar del incidente, pero no retuvieron a Rojas. “Los de la camioneta, al escuchar que las autoridades venían en camino, entraron corriendo al apartamento”, contó la mujer agredida.
Uno de los uniformados entró al edificio para verificar los hechos. Al mismo tiempo, un familiar del presunto agresor los insultaba: “Me dijo: ‘Agradezca que mi hermano no les hizo nada más’”.
Luego de unos minutos, el policía salió del conjunto y le recomendó a la pareja conciliar con Rojas. “Ustedes pueden conciliar con el señor o que la valoren en Medicina Legal e iniciar el proceso. Yo no me puedo poner de parte de ninguno de los dos”, se le oyó decir a un patrullero en una grabación que hizo la agredida con su teléfono celular.
La Secretaría de la Mujer le hizo seguimiento al caso este lunes. Una psicóloga de la entidad comenzó a atender a la víctima, quien recibió asesoría jurídica.
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“La incapacidad que me dieron es provisional, pues en estos días debo volver al médico, porque es probable que me someta a una rinoplastia”, asegura Alexandra Blandón.
EL TIEMPO intentó localizar al señor Rojas, pero no contestó las llamadas.
Problemas para denunciarSegún Blandón, tuvo inconvenientes para realizar la denuncia en la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de Paloquemao.
“Estuve en el Hospital Militar día y medio. Salimos con mi esposo de inmediato para allá, pero no nos atendieron porque el horario es de 8 de la mañana a 2 de la tarde”.
La mujer cuenta que su pareja tuvo que enojarse con los funcionarios de la Fiscalía para que hicieran el trámite. Blandón continuará el proceso judicial contra su agresor con la ayuda de un abogado privado.
BOGOTÁ