Por considerar que sus compañeros son inocentes y que están siendo "chivos expiatorios" del poder, universitarios se dirigieron este lunes hasta Paloquemao para pedir la liberación de los ocho capturados el sábado 24 de junio por los atentados ocurridos en el Centro Comercial Andino y que dejaron 3 personas muertas.
Desde el domingo 25 de junio, el grupo de capturados fue llevado al complejo judicial de Paloquemao, donde se encuentran en proceso de legalización de las capturas por su presunta implicación en los hechos.
En la mañana del lunes 26 de junio, una juez ordenó dejar en libertad inmediata a uno de los capturados, identificado como Iván Ramírez León. Los abogados de los demás detenidos, por su parte, han apelado la legalización de las capturas.
Este lunes, egresados de la carrera de sociología de la Facultad de Ciencias Humanas, de la Universidad Nacional, difundieron un comunicado en el que rechazan "de manera vehemente la forma en la cual la Fiscalía General de la Nación y la Policía Nacional vienen estigmatizando y persiguiendo de forma sistemática a personas pertenecientes a universidades públicas, especialmente, a quienes hacen parte de la Universidad Nacional de Colombia".
Califican las capturas como una "cacería de brujas". "Nos parece sumamente extraña y sospechosa la agilidad con la cual han dado 'resultados' los entes oficiales frente al atentado del Centro Comercial Andino, teniendo en cuenta la lentitud en los procesos investigativos que caracteriza a la Fiscalía", agregan.
En el mismo comunicado recuerdan el caso del profesor de esa Facultad Miguel Ángel Beltrán, quien afrontó un proceso judicial por presuntamente tener vínculos con las Farc, caso del que el docente resultó absuelto por parte de la Corte Suprema de Justicia en 2016.
Otro caso reciente que recoge el comunicado es la captura de 13 personas en 2015, presentadas como presuntos integrantes del Eln y responsables de atentados contra algunas sedes de Porvenir en Bogotá. La mayoría de estos, recuerdan, fueron liberados. Finalmente, el caso de Mateo Gutiérrez, quien en este momento es procesado por su presunta participación en otros actos, pero que fue capturado tras la explosión de un petardo cerca de la plaza La Macarena.
"Alzamos nuestras voces para manifestar que la Universidad Nacional de Colombia, y la universidad pública, no son la cuna del terrorismo de este país, que las y los estudiantes, las egresadas y los egresados, así como el conocimiento y las acciones que desde estos espacios emerge, no pueden ser estigmatizados arbitrariamente en beneficio de la intransigencia investigativa y judicial que caracteriza a las autoridades estatales", se lee en el texto que han compartido también por redes sociales que concluye rechazando cualquier tipo de violencia.
UNIDAD DE REDES SOCIALES
EL TIEMPO