TransMilenio hizo su cierre de gestión en la tarde de ayer repasando los logros y proyectos que se llevaron a cabo entre el 2016 y el 2019, un período que estuvo lleno de contrastes.
De un lado, sacó adelante con éxito iniciativas como la renovación de los buses antiguos y la puesta en marcha del TransMiCable. Pero aún le quedaron pendientes algunos retos, sobre todo relacionados con el uso de los buses zonales del SITP y la actualización tecnológica de las estaciones.
Ese fue uno de los temas que se tocaron en el cierre de gestión. En noviembre, TransMilenio anunció que estaba lista la compra de 483 buses eléctricos zonales del SITP. La gerente de TransMilenio, María Consuelo Araújo, señaló que el próximo 23 de diciembre empezaría a rodar el primer bus eléctrico del SITP en las calles de Bogotá.
TransMilenio también consiguió otros logros, entre ellos la licitación y renovación de las fases I y II de su flota troncal. Fueron adquiridos 1.441 buses nuevos, que permitieron incrementar en 160.000 los cupos en el sistema.
Así mismo, puso en operación el TransMiCable, en Ciudad Bolívar, con lo cual aumentó la capacidad del sistema. Actualmente, este medio de transporte beneficia a más de 700.000 personas.
TransMilenio lideró iniciativas para mejorar el comportamiento de los ciudadanos. Implementó una estrategia para reducir el número de colados que incluyó campañas comunicativas y el fortalecimiento de la cultura ciudadana, que es algo en lo que aún hay que avanzar.
“Claro que hay que disminuir los colados, pero también hay que poner atención en los vendedores ambulantes y el resto de los pasajeros”, explicó José Stalin Rojas, director del Observatorio de Logística, Movilidad y Territorio de la Universidad Nacional.
Entre los pendientes que quedan está, según la encuesta de Percepción Ciudadana 2019 de Bogotá Cómo Vamos (BCV), el porcentaje de usuarios satisfechos con el servicio del SITP, que pasó del 32 % a 24% este año.
Además, del 16 % de personas que usaban ese medio de transporte en el 2016 se bajó a un 13 % durante el 2019.
Otra de las deudas del sistema tiene que ver con su adaptación a la tecnología y su seguridad. Aunque TransMilenio ha implementado algunos avances como la red wifi gratuita que hay en las estaciones o el plan piloto de geolocalización de los buses del SITP sobre la carrera 11, para el profesor Rojas este es uno de los aspectos que la empresa no logró mejorar.
“A las estaciones les falta adaptarse a los avances, son vetustas y riesgosas para los usuarios. La seguridad de los pasajeros es también otra deuda”, explicó.
De hecho, esta semana, en la estación de La Castellana hubo un asalto masivo perpetrado por ocho delincuentes, que les quitaron sus pertenencias a unas 30 personas.
BOGOTÁ@BogotaET