“Señores concejales y alcalde: ojalá una vía sin arreglar no los lleve a vivir una tragedia como la de las víctimas de La Calera y el barrio San Luis en Bogotá”. Con frases contundentes como esta, residentes de varias veredas del oriente se unieron a las quejas de otros sectores del municipio de La Calera por la misma razón: el deplorable estado de las vías.
(Le puede interesar: Sitios de rumba en Bogotá estarán obligados a cumplir estas normas)
Marcharon pacíficamente desde la antigua clínica del municipio hasta el Concejo Municipal para pedirles a los cabildantes que cumplan con su trabajo de representación de la comunidad y al alcalde encargado, porque Carlos Cenén no fue, que explique qué ha pasado con los recursos que prometió en campaña para arreglar durante los 100 primeros días de su mandato las vías veredales.
Y no solo llevaron pancartas, llevaron videos que certificaban las promesas incumplidas. “No queremos otro desastre como el de La Calera. No tenemos vías, sino trochas. En El Rodeo no podemos llegar tranquilamente a nuestras casas. Solo cepillan la vía y tapan con tierra, que llueve y se vuelve lodo”, dijo la abogada Adriana Sanabria.
(Lea: ‘Se fue sin deudas de nada’: así era Angela, mujer que murió en vía a La Calera)
Otro de los líderes, Tito Morales, del oriente caleruno, denunció que no es posible que un alcalde que repite mandato vea a La Calera totalmente destruida y no haga nada. “No tenemos hospital, no tenemos buenos colegios, no tenemos vías. Hay gente que tiene que caminar kilómetros para llegar a sus veredas. Es una persona arrogante y prepotente”.
Amparo Tamayo, otra residente de la zona, denunció que, incluso, la empresa de transporte Cootransbonaire, cuyos voceros le pidieron a la administración ayudarlos con las vías, terminó siendo despreciada en sus peticiones. “Lo único que les dijo fue que si no podían llegar a los destinos, se fueran. Ellos son los únicos que nos transportan”.
Javier Molina, residente hace 36 años de El Frailejonal, dijo que en La Calera no hay acueducto, no hay alcantarillado ni iluminación efectiva. “Ni siquiera recogen como debe ser las basuras, pero, eso sí, todo lo cobran. A las vías no se les hace mantenimiento desde hace dos años. Tampoco tenemos servicio médico, y la única clínica que había está cerrada por deficiencias administrativas”.
Maxi Villegas, vicepresidente de la Veeduría Ambiental de La Calera, pidió intervención urgente de los entes de control. “El alcalde Carlos Cenén Escobar ha estado en diferentes puestos desde 1990. En esta última legislatura, el único interés que han tenido es firmar licencias de construcción. No han usado los recursos para nada, menos para arreglar las vías”.
Una niña se enfermó
y no hubo posibilidad de entrar
una ambulancia. Ya es justo que nos digan cuándo van a hacer las obras
Residentes de la vereda El Salitre también se hicieron escuchar. “Soy Maritza Ramírez. Hace once meses tuvimos el mismo derrumbe que se presentó en Tilatá, que nos mantuvo aislados durante una semana entera. En la entrada de nuestra vereda tenemos un colegio público y ahí la vía de acceso es imposible si llueve”.
Denunció que el colegio Alcaparros, que se había comprometido hace 15 años a mantener la vía, nunca lo ha hecho. “Suben 80 rutas enumeradas. 200 carros de padres y acudientes a alta velocidad, pero de mantenimiento, nada”. Además, dijo que padecen dos puntos de derrumbe: uno en el poste 136 y otro en El Palomar.
(También: Los rostros detrás de la tragedia en la vía a La Calera a causa de las lluvias)
“Estuvimos tres días enteros guardados en nuestras casas. Una niña se enfermó y no hubo posibilidad de entrar una ambulancia. Ya es justo que nos digan cuándo van a hacer las obras”, afirmó Ramírez.
Reclamos en el Concejo
Pese a que al comienzo se le negó la entrada a la totalidad de los manifestantes al recinto y muchos se ofendieron cuando les cerraron las puertas en la cara, algunos ingresaron.
Una trabajadora de la salud expresó que puede entender que la alcaldía haya tenido problemas por la pandemia, pero argumentó que no se le puede echar a esta la culpa de todo, pues hasta el material que están entregando para mantenimiento no es recebo.Cuando llueve se vuelve una sopa.
“Con mi esposo y mis hijos nos tocó desenterrar el carro a las 11 de la noche. Y eso mismo les pasa a muchos campesinos que cultivan para que nosotros comamos. Terrible que el señor alcalde no esté aquí. ¿Alguno de los concejales fue cuando el puente de la escuela El Rodeo se cayó y los niños tuvieron que pasar embarrados con los pies mojados y sucios? A mí sí me duele eso porque yo recibo a esos niños en urgencias”, dijo la manifestante, y denunció que hace cuatro años no se les hace mantenimiento a las vías de la vereda Mundo Nuevo.
(Además: La vía para llegar a La Calera por El Codito es una trocha que urge arreglar)
La indignación es tal que a muchos les temblaba la voz haciendo sus reclamos. “Les exigimos que trabajen por el pueblo. Estaba caminando con mi cuñada en El Rodeo y nos recogió una funcionaria de la alcaldía, y ella nos dijo: ‘Me da risa que cinco gatos estén peleando en la vía sabiendo que no les van a parar bolas’. No sean cínicos. Necesitamos vías. Estoy hablando con rabia porque ustedes no han hecho nada”, afirmó un ciudadano que denunció que le tocaba caminar con su mamá, adulta mayor, por entre el barro para movilizarse por cualquier lado.
Dijeron incluso que ni los Bomberos ni la Policía pueden acceder a algunos sitios por el difícil acceso.
Paola Barrera, otra líder de la zona, instó a los organismos del control a hacer presencia en el municipio para que revisen en dónde se han invertido los recursos para el arreglo de las vías, incluso los del proyecto de Cuarta Generación (4G) Perimetral de Oriente de Cundinamarca, concesionado por la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), por lo que ellos consideran errores de ingeniería.
EL TIEMPO pidió conocer las reacciones del alcalde Carlos Cenén a estas reclamaciones, pero al cierre de la edición del impreso no se había podido obtener respuesta alguna. Se sabe que el alcalde encargado, Humberto Montoya, tomó nota de todos estos reclamos en un acta.
REDACCIÓN BOGOTÁ
CAROL MALAVER
CARMAL@ELTIEMPO.COM
Comentar