Un intento de motín se llevó a cabo en las instalaciones de la cárcel El Buen Pastor, luego de que las reclusas permanecieran más de 15 horas sin recibir alimentos.
El intento de motín se produjo luego de que la Secretaría de Salud sellara la cocina del establecimiento. Según un comunicado de la institución, la clausura de la cocina se originó por motivos de salubridad, debido a una inspección realizada en donde encontraron “120 kilos de pollo y refrigerios en estado de descomposición”.
Debido al intento de motín y las quejas por el hambre, se conoció que a las siete de la noche de este jueves les dieron como cena una tajada de mortadela congelada, acompañada de un néctar de fruta y un pedazo de pan.
El INPEC se pronunció ante los hechos y aseguró que “en ningún momento se presentó alguna situación de orden público que afectara y alterara la seguridad de la población privada de la libertad. Además, aseguraron que la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (USPEC) ya se encontraba trabajando para levantar la medida sanitaria interpuesta".
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