Indígenas misak, en modo de protesta, derribaron en la madrugada de este viernes la estatua de Gonzalo Jiménez de Quesada, fundador de la ciudad.
Esta misma comunidad indígena había hecho lo mismo con la estatua de Sebastián de Belalcázar en la ciudad de Cali la semana pasada.
Ante esto, el Distrito ha informado que gestores de convivencia de la la alcaldía local de La Candelaria están llegando al lugar para iniciar un proceso de diálogo con la comunidad indígena que se encuentra sobre la plazoleta, que está a unas pocas cuadras del Palacio de Nariño. También hay presencia de uniformados de la Fuerza Disponible de la Policía.
En un video publicado en redes sociales desde la cuenta de Ariel Ávila, los indígenas afirman: "A partir de este momento la ciudad no va a tener a este violador y supuesto conquistador. Este es el movimiento de mujeres y autoridades indígenas del suroccidente". La comunidad sigue sobre la plazoleta con tambores y banderas que representan su movimiento.
Comentar